Hace poco, una joven de Cañaveral de León consiguió una silla de ruedas gracias a una iniciativa como ésta. En el caso del IES José Caballero, la idea se le ocurrió a la orientadora del centro, Ana Rosa Fernández, tras leer en una publicación educativa que varios centros gallegos estaban recogiendo tapones para ayudar a un niño portugués que necesitaba una prótesis mioeléctrica, esto es, una mano motorizada.
Con el objetivo de ayudar a este pequeño, el instituto onubense puso en marcha en diciembre esta campaña solidaria, ya que la propuesta de Rodríguez fue acogida con entusiasmo por toda la comunidad educativa.
Diogo Farinhoto, que es como se llama el pequeño portugués, ya consiguió gracias al apoyo gallego su prótesis, pero eso no impidió que el centro onubense siguiera con la campaña, ya que están convencidos de que hay muchas personas más que ayudar, y seguro que en su entorno más cercano. Por ello, están a la búsqueda de destinatario de todos esos tapones, que una vez vendidos a una empresa, reportan el dinero necesario para sufragar la prótesis o silla de ruedas necesaria.
Un posible destinatario podría ser Protección Civil de Punta Umbría, que también está recogiendo tapones para una chica que necesita una silla de ruedas. A la espera de contactar con ellos, en el centro siguen con la campaña, ya que además de ser un gesto solidario, “es una gran actividad de educación ambiental, para concienciar sobre el reciclaje”.
La intención del centro onubense es entregar los tapones recolectados el Día de la Paz, que se celebrará el próximo 30 de enero. Por el momento, ya tienen cuatro bolsas de basuras, dos biombos y cuatro cajas de cartón repletas de tapones, y son los alumnos de Secundaria los que más se han volcado en la iniciativa, hasta el punto de implicar a sus familias. Aún queda tiempo, así que, a recoger tapones se ha dicho.
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