Según este estudio, uno de cada cinco dueños de inmuebles decide tener su vivienda vacía y sin rentabilizar, porque cree que alquiler le puede dar problemas, de ahí que los propietarios exijan cada vez más garantías de solvencia a los inquilinos con el fin de intentar minimizar el riesgo de impagos.
El gerente de Prodyser, una de las principales agencias en Cádiz de servicios inmobiliarios y financieros, Pepe Linares, se muestra de acuerdo con el análisis de Arag. “Es cierto que gran parte de los propietarios son reticentes a alquilar”, señala Linares que además subraya que se está produciendo un “boom” en el alquiler de viviendas “provocado por la subida de las hipotecas, ya que muchas de ellas han pasado de 600 euros mensuales hasta los 1.000” y por los recortes a la concesión de créditos hipotecarios por parte de las entidades bancarias y financieras. “Si las hipotecas suben a los 1.000 euros o más, los ciudadanos optan por el alquiler de un piso normal que ronda en Cádiz los 650 euros al mes”.
A juicio de Linares, “este movimiento está generando demanda de viviendas, pero para niveles adquisitivos bajos; una demanda que está superando a la oferta en comparación con anteriores períodos en que se producían más ventas que alquileres. Se ha invertido la pirámide”.
Para el gerente, “es normal que los propietarios tengan desconfianza a la hora de alquilar, sobre todo después de las experiencias en pleitos de larga duración y en el mal estado en que suelen dejar las viviendas los morosos”.
Pero ante esta situación hay soluciones y Prodyser ha implementado una en colaboración con Generali Seguros SA por la que en el mismo contrato de alquiler se suscribe un seguro contra impagos.
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