Según establece la normativa vigente, recogida en el Decreto de la Junta de Andalucía 47/2004, en la Ley 51/2002, y en el Decreto 72/92, cualquier hospedaje de hasta 75 unidades de alojamiento debe contar con una adaptada para discapacitados. Hasta 150 serían dos y hasta 300, tres. Ya a partir de los 300 serían 4 y por cada 100 unidades más se debe añadir una más adaptada. “Por norma general en Cádiz todos los hoteles suelen tener una. Podemos decir que los hoteles gaditanos están bien adaptados, siempre teniendo en cuenta que desde nuestro punto de vista se puede mejorar”, añadió Diego Márquez.
No obstante, desde Fegadi hablan sobre una situación muy particular, pero que perfectamente podría darse, una convención de una entidad similar a ellos.
“En este caso tenemos una sugerencia que perfectamente se podría aplicar, que es aumentar el ancho de las puertas de los aseos unos 10 centímetros más, parece muy poco, pero con eso hacemos mucho, pues se mejora la accesibilidad de las personas con silla rueda. En esas condiciones,. podemos usar cualquier habitación”, matizaron desde Fegadi.
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