Y así, la capital gaditana lo festejará y también estrenará un nuevo perfil, porque El Doce dotará a la capital de nuevas infraestructuras, como la llegada de la alta velocidad en tren o el segundo puente sobre la Bahía, que se elevará a una altura de 180 metros, convirtiéndose en un "emblema de la capital". En la actualidad "ya es una de las mayores obras de ingeniería de España", según han subrayado a Europa Press desde el Patronato Provincial de Turismo.
En el horizonte está la voluntad de convertir 2012 en un revulsivo económico, social, político y cultural para la Bahía de Cádiz, como agradecimiento a ese "espíritu de Cádiz", moderno y generoso.
La intención última es celebrar que mientras los franceses bombardeaban la ciudad, con más de 15.000 proyectiles, Cádiz siguió con su intensa actividad teatral y hasta decidió cantarle a la guerra, convirtiendo en un clásico la copla "con las bombas que tiran los fanfarrones, se hacen las gaditanas tirabuzones". Y es que esta música responde a un hecho real: aquella bomba que cayó cerca del Hospital de Mujeres, que tenía en su interior más plomo que pólvora y que las mujeres de Cádiz utilizaron como bigudíes para arreglarse los bucles.
Así, los festejos se prolongarán durante todo el año con espectáculos, cabalgatas, recreaciones históricas, congresos, conciertos, concentraciones de barcos, desfiles y degustaciones gastronómicas.
En el terreno cultural, Cádiz será Capital Iberoamericana de la Cultura y entre las actividades lúdicas y culturales, destacará el estreno de la obra de teatro 'Estado de sitio' de Albert Camus, el concierto de la Orquesta West Eastern Diván de Daniel Barenboim en agosto, el ciclo 'Música de las Cortes Gaditanas' o el espectáculo 'Viva La Pepa 2012' del pianista gaditano Manuel Carrasco.
Una de las mayores apuestas es la VIII Bienal Iberoamericana de Arquitectura y la cita más importante en el apartado político-institucional tendrá lugar con la celebración de la XXII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.
Además, Cádiz recuperará para el futuro lugares tan emblemáticos -rehabilitados para la ocasión- como el Oratorio de San Felipe Neri, que acogió los debates de las Cortes y la redacción de La Pepa. Tanto la iglesia como el edificio anexo abrirán al público en marzo como centro de interpretación de La Pepa: una Carta Magna que por primera vez establecía la soberanía popular, la división de poderes, la libertad de expresión, la libertad de imprenta o la universalización de la educación y que fue clave en la modernidad de España, de América y también de Europa.
DEL PARADOR A LA LOTERÍA
En 2012 también abrirá sus puertas el nuevo Parador Hotel Atlántico. Otra de las actuaciones que darán especial relevancia a Cádiz y proyectarán su imagen a nivel nacional serán el Sorteo de la Lotería del Niño del 6 de enero y el de la Lotería Nacional La Pepa 2012 el 24 de marzo, porque cabe recordar que fueron las Cortes de Cádiz las que instauraron la lotería nacional, como recuerda una placa en la plaza de San Antonio de la capital.
Con todo ello, se pretende dar relevancia a la firma de un texto que cambió para siempre la manera de entender la política en España. Por eso, los actos académicos y políticos se mezclarán con una marea cultural y ciudadana para celebrar los valores con los que La Pepa marcó a las sociedades modernas.
El Consorcio para la Conmemoración del II Centenario de la Constitución de 1812, fue creado en 2007 como órgano gestor de la Comisión Nacional, establecida para organizar y planificar los actos relativos a la conmemoración del bicentenario de este texto fundamental, bajo la presidencia de Honor de los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía.
San Fernando ya celebró en 2010, que en la entonces llamada 'Isla de León', se constituyeron en 1810 las primeras Cortes Generales y Extraordinarias de España, que en 1812 recogerían su fruto en Cádiz con la aprobación de la primera Constitución española, la primera constitución liberal de Europa.
Gracias a este texto, España dejaba a un lado los preceptos del Antiguo Régimen, el derecho heredado y la monarquía absolutista, para abrazar valores que hoy son irrenunciables como la soberanía nacional, el derecho a la educación o la libertad de imprenta y de pensamiento. Estos derechos fueron la semilla de una nueva sociedad en la que se abolían los señoríos y la Inquisición, se abordaba la reforma de la agricultura y se establecían nuevas garantías del derecho penal.
Con ella nacieron las libertades, los derechos civiles, el concepto de ciudadano y los valores que abrieron la puerta a la Modernidad.
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