—El I Plan de Ajuste municipal presentado por el Gobierno local del PP ya ha pasado por el Pleno. ¿Y ahora, qué?
—En el Pleno se incorporaron propuestas de otros partidos políticos que eran coincidentes con las nuestras y se incorporan al Plan de Ajuste según ley, y a partir de aquí habrá seguimiento quincenal, con informes, como indica el propio plan. La comisión de seguimiento va a estar presidida por la alcaldesa y también contará con los delegados de área del Gobierno. El objetivo es velar por el cumplimiento de las medidas adoptadas, porque esto es una cosa que no se va a quedar sólo en el papel.
—¿En qué consisten las líneas maestras del Plan de Ajuste?
—Las líneas maestras se encuentran en todas las áreas de gobierno, no sólo es del área de Economía. Ha participado también el área de Alcaldía, con la reducción de la retribución de los miembros de la Corporación, ya realizado. También una reducción del personal eventual, una reducción del 25% de las retribuciones delos grupos municipales. Asimismo se ha solicitado la liquidación o disolución de empresas cuyo objeto social ha perdido virtualidad en la actual coyuntura económica municipal, como Comujesa y Xerez 21. Además, se plantea la reducción y adecuación de la mercantil Jecomusa para adaptarla al servicio público encomendado. Lógicamente con la aplicación de medidas necesarias para solventar medidas necesarias de capital social. Como sabemos, es una empresa que está en situación legal de disolución, y caben tres alternativas. Cuando se está así, con fondos propios negativos, pese a la ampliación de capital, sólo se puede disolver, con lo que se prescindiría del 100% de la plantilla, cosa que descartamos. Otra opción es hacer un concurso de acreedores, que ya se ha presentado en el Juzgado Mercantil, que llevará implícito un ERE, para adecuar la plantilla al nuevo modelo de televisión. Es una medida dura, que todos lamentamos, pero que es necesaria por todas las pérdidas que tiene la sociedad. Otra posible solución, que es inviable por la situación económica del Ayuntamiento, es una ampliación de capital recurrente todos los años, porque por estructura de ingresos y de personal siempre sería deficitaria, en 5,7 millones de euros anuales. El Ayuntamiento no tiene capacidad económica para hacer esto todos los años, ni puede exigirse esto a los ciudadanos en un servicio que no es esencial.
—¿Ha contemplado el Gobierno local la posibilidad de sacar a concurso la radio y televisión municipal para que sea explotada por una empresa privada?
—Hay que tener en cuenta la situación financiera de esta sociedad, y no por su endeudamiento con la Seguridad Social, Ayuntamiento y acreedores varios, que entre todo suma unos 10 millones de euros, sino por el modelo actual de la televisión. Teniendo en cuenta ingresos y gastos de explotación daría pérdida permanente en el tiempo, por lo que no creo que haya un inversor privado dispuesto a comprar una empresa que pierde todos los años. La única opción sería decir compro esta empresa o concesión de un canal, pero con unas medidas en las que pagaría como máximo un euro al Ayuntamiento y supondría una desprotección total de la plantilla. La empresa pública de televisión admite unos 25 trabajadores, la empresa privada muchos menos. Creo que lo que hemos hecho es una protección de la plantilla de Jecomusa, para minimizar los efectos. Sé que afecta a parte del personal, que son personas y tienen familia, pero lo que intentamos es que afecte a los menos posibles.
—Da la sensación de que los únicos ajustes se van a llevar a cabo en Onda Jerez…
—No es así, porque además de los ya dichos, en la Delegación de Personal se propone una reducción de salario de los empleados municipales que ganen más de 40.000 euros como primera medida. Esto afecta fundamentalmente al plus de productividad. A partir de 40.000 euros se reducirá el 1,5%, a partir de 45.000, el 3%, a los de 50.000, el 4,5%, y así sucesivamente llegar a los que tienen ingresos de 140.000 euros, a los que les afectará el 31,5%. Es una reducción progresiva, por lo tanto justa, y la ley lo permite. Además, ya está probada. Y no es la única, porque también planteamos la amortización y reducción de puestos de trabajo que queden vacantes por distintas cosas, como jubilaciones. Además, ya se ha hecho la denuncia del convenio, que hay que hacerla por ley dos meses antes, y ahora tenemos que pedir un esfuerzo a todos los empleados municipales, porque hay que reducir el gasto de personal en 10 millones de euros. Nosotros estamos esperando las propuestas de los representantes de los trabajadores, porque no queremos imponer nada. Si esas propuestas consiguen esos 10 millones de euros, pues ya se tiene la solución. Si no es así, nos veremos obligados a tomar medidas que no queremos. Pero todas las medidas que se contemplan el Plan de Ajuste pasan por mantener el número de personas que forma la plantilla municipal. Pero todos tenemos que hacer un esfuerzo, porque el Ayuntamiento tiene un endeudamiento de cerca de mil millones de euros y un déficit presupuestario de 31 millones de euros, que lo primer que exige es un plan de ajuste para equilibrar el presupuesto.
—¿Cuál es el plazo para alcanzar el déficit cero?
—Este Plan de Ajuste suma unos 26 ó 27 millones de euros. También habrá otras medidas, no de este calado, que complementen este plan y que se harán simultáneamente. Cuando se toma una medida el efecto no es inmediato, pero espero que a mediados de 2013, en julio o agosto, se consiga el equilibrio presupuestario, es decir, el déficit cero, para a partir de ahí intentar conseguir el superávit presupuestario para destinarlo al pago de la deuda.
—Imagino que ese planteamiento se hace teniendo en cuenta los retrasos de ingresos que han de recibirse por parte de otras administraciones...
—Teniendo en cuenta todos los factores de ingresos. Quiero dejar claro que los ingresos nunca serán por la subida de los impuestos a los ciudadanos, porque no se les está dando el servicio que se merecen por la situación actual del Ayuntamiento. El ciudadano puede estar tranquilo, porque no se le va a actualizar ni el IPC. Ahora bien, si gestionamos un convenio, que vamos a firmar este octubre con la Seguridad Social y Hacienda, nos va permitir captar nuevas subvenciones que se están perdiendo por incumplimiento, la no haber convenio. Subvenciones que han afectado, por ejemplo al transporte público en más de un millón y medio de euros anuales en los dos últimos años, también influye en Turismo, en Ememsa, con las subvenciones ganaderas… los ingresos esperamos aumentarlos no por la vía de impuestos, sino por subvenciones, y porque desde Urbanismo se va a poner un millón de metros cuadrados en valor, con convenios público-privados, que hará que entren empresas y aumenten la actividad económica y los ingresos. —Ya se han sobrepasado los 100 primeros días de Gobierno. Ahora, con la perspectiva que dan estos algo más de tres meses, ¿cómo ve la cosa? ¿Estaba todo tan mal?
—Yo creo que un poco más que mal. La situación de partida es caótica desde el punto de vista del endeudamiento, que incluyendo a las empresas municipales es de 958 millones de euros con déficit presupuestario de 31 millones de euros. Y lo que es peor, con la liquidez comprometida para los próximos años: el 100% de 2011 de los impuestos que recauda Diputación ya estaban comprometidos; y los años 2012, 13, 14 y 15 entre el 70 y el 75%, y a partir de ahí baja el porcentaje, pero hay dinero comprometido hasta el año 2023. La deuda pensábamos que era de 700 millones, lo del déficit presupuestario éramos conscientes, pero lo que no podíamos pensar nunca es que la tesorería estuviera así de comprometida. Han dejado al Ayuntamiento estrangulado desde el punto de vista de la tesorería, que en palabras del tesorero sería definido como un estado de suspensión de pagos.
—Y en ese estado, ¿cómo puede un Ayuntamiento prestar servicios al ciudadano?
—Hay alguna toma de razón, que son para pagar a una concesionaria como Urbaser. El resto… por eso se justifica el Plan de Ajuste, porque se ajuste el presupuesto y vamos pagando. Pero con la austeridad no vale, hay que tomar medidas. Por ejemplo, la reducción del capítulo de gasto corriente y transferencias, que se va a reducir en un 10% de media. Eso representa 5 millones en el presupuesto anual. La disminución del gasto del suministro eléctrico también es importante, y representa otro 2,5%. No todo es personal, al que puede afectar un 30% como mucho, porque también hay medidas económicas. En el tema de suministro estamos en una medida penalizada en un 20%, porque quiere el Gobierno que vayamos a un mercado libre. Por tanto, si se va al mercado libre se reduce un 20%, y si añadimos un plan de optimización energética la reducción de la factura puede representar otro 15%. En total, un 35% en una factura de suministro muy elevada, ya que tenemos 25.000 puntos de luz en el municipio, lo que representa 2,5 millones de euros por un lado y otro 2,2 millones de euros por el mantenimiento del alumbrado público. Son 3,7 millones de euros de ahorro, lo que no sé es cómo no se ha hecho antes, porque el mercado libre no es de ahora. Todo tiene un efecto en el Plan de Ajuste.
—Es inevitable que le pregunte por las concesionarias y el pago de las nóminas. Usted ya ha dicho que los próximos dos años serán complicados…
—Mientras que no haya un equilibrio presupuestario seguiremos teniendo dificultades. Pero aunque haya un equilibrio presupuestario será complicado, porque la tesorería seguirá ajustada mucho más tiempo, por falta de liquidez. Vamos a tener tensiones de liquidez mucho más tiempo, aunque no tendremos la asfixia económica actual. Si es verdad, que cuando hay déficit cero y un plan económico y financiero realizado ganaremos confianza, porque se sabrá que estamos tomando medidas. Sería una irresponsabilidad mirar para atrás. Nosotros lo vamos a hacer, con el coste que tenga, porque es nuestra dificultad. Va a haber dificultades de tesorería, pero ganaremos la confianza de las entidades financieras, de las administraciones y de las concesionarias, porque tendremos las cuentas ordenadas.
—Los sindicatos y la oposición han planteado el rescate para volver a sacar una concesión o la municipalización de algunas concesionarias. ¿Eso es viable desde el punto de vista económico?
—Teniendo en cuenta es absolutamente inviable. El Ayuntamiento tiene que buscar concesionarias con suficiente capacidad económica por si en alguna ocasión puntual un mes no paga ésta tenga la fuerza económica suficiente para pagar a los trabajadores. Entrar en la municipalización de servicios sería inviable, porque no tenemos ni siquiera para pagar lo que tenemos, una plantilla sobredimensionada. Pero sí tenemos la obligación de buscar empresas que cumplan con sus trabajadores aunque el Ayuntamiento no lo haga, porque será una cosa circunstancial. De hecho, hay empresas que lo hacen, como es el caso de Limasa, que alguna vez se ha despistado en los pagos, pero normalmente abona el 100% a sus trabajadores aunque el Ayuntamiento no le ingrese el 100% mensual a la empresa. Igual tendrá que ser la de transportes y todas.
—No le he preguntado por la Relación de Puestos de Trabajo.
—La RPT es un tema importante, porque ordena la plantilla. Tener una manera de cómo optimizar los recursos humanos es muy importante, para saber cuál es la plantilla ideal y para que la gente sepa que para acceder a un cargo hay que tener unos requisitos previos o adquirirlos para hacer carrera profesional. Todo el mundo tiene derecho a que no se cometan injusticias. Sobre el 23 ó 24 de octubre estará lista la RPT.
—La última se la dejo a usted.
—Con trabajo, constancia, confianza, honradez y honestidad todos los problemas se minimizan. Hay que trabajar mucho por Jerez, con mucho sentido común, para poner orden a este caos organizativo y económico.
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