En la última junta de Gobierno local, la delegada del Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cádiz, Paloma Bordóns, informó de que las barbacoas del Carranza verán reducido su espacio de realización en un módulo más. Esta medida se toma desde el Gobierno municipal junto a otras, que no fueron concretadas, con un objetivo muy claro, recuperar la Bandera Azul que este año no se otorgó a la playa Victoria.
Todos los años los vecinos de la zona comprendida entre el antiguo Cementerio de San José y el módulo Malibú han sido quienes han padecido de forma más directa los efectos derivados de este evento, como el ruido o el humo. No obstante, el colectivo vecinal nunca se ha manifestado frontalmente en contra de su realización aunque sí han solicitado en años anteriores una progresiva reducción de las mismas.
“Nosotros nunca nos hemos opuesto a que la gente se divierta, pero sí hemos pedido que las barbacoas se reduzcan, pues ese fin de semana siempre recibimos muchísimas quejas de los vecinos que no pueden descansar. Además hay que recordar que muchos de los miembros de la asociación hemos colaborado como voluntarios con el Ayuntamiento para limpiar la playa. Nos parece bien que cada año se reduzca el espacio para hacer barbacoas hasta que se quede en algo racional”, matizó Santos.
Denuncias
En otro orden de cosas, la AVV ha recibido quejas de asociados de que el ensanche del acerado de la calle Brasil está siendo utilizado por algunos hosteleros para agrandar sus terrazas “y dificultan el paso a los vecinos”.
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