Si estás pensando en escaparte a Córdoba y no sabes por dónde empezar, tranquilo, que te lo explicamos. Esta ciudad andaluza no solo es famosa por su clima calentito y sus tapas que te hacen la boca agua, sino también por sus rincones que parecen sacados de una película. Aquí dejamos una lista de lugares que no te puedes perder si vas a Córdoba.
La Mezquita-Catedral
Vamos a empezar por lo que todo el mundo conoce. La Mezquita-Catedral es el símbolo de Córdoba y con razón. Este sitio es una mezcla de culturas: primero fue mezquita, luego catedral, y hoy es uno de los lugares más impresionantes que vas a ver en tu vida. Entrar ahí es como teletransportarse a otra época, con columnas infinitas y arcos de colores que te dejan con la boca abierta.
Los free tour por Córdoba casi siempre arrancan aquí, y es lógico. Lo que no te cuentan es que hay rincones menos conocidos dentro de la Mezquita donde puedes sentirte como un explorador en pleno descubrimiento.
El Alcázar de los Reyes Cristianos
Otro sitio que merece la pena es el Alcázar de los Reyes Cristianos. Quedarás impresionado con los jardines más bonitos de la ciudad, llenos de fuentes y flores que parecen un cuadro. Además, desde las torres tienes unas vistas de la ciudad que te dejan sin palabras.
Si te gusta la historia, te interesará saber que este lugar fue una fortaleza, residencia real y hasta sede de la Inquisición. Vamos, que las paredes tienen más historias de las que puedas llegar a imaginar.
El Puente Romano y la Torre de la Calahorra
¿Quieres sentirte como en una serie de Netflix? Cruza el Puente Romano al atardecer y mira la ciudad desde la Torre de la Calahorra. Este puente es como una pasarela al pasado, con el río Guadalquivir haciendo de espejo y la ciudad iluminando poco a poco. En la torre, además de unas vistas que valen oro, hay un museo que te explica un poco más sobre la historia de Córdoba y su legado árabe, cristiano y judío.
El Barrio de la Judería
Prepárate para pasear por calles estrechas y empedradas llenas de encanto. El Barrio de la Judería es de esos sitios donde quieres perderte a propósito. Aquí puedes encontrar pequeñas tiendas, patios escondidos y rincones que parecen diseñados para Instagram.
En este barrio también está la Sinagoga de Córdoba, una de las pocas que quedan en España. Es pequeña, pero tiene su encanto.
Los patios de Córdoba
Vale, esto suena a tópico, pero los patios de Córdoba son una pasada. Flores por todos lados, paredes blancas y macetas de colores que te alegran el día. Si puedes, vete en mayo, que es cuando hacen el concurso de patios y todo está decorado como nunca. Eso sí, si vas en otra época, algunos patios siguen abiertos, y los dueños suelen estar encantados de enseñarte cómo cuidarlos. Es un lugar increíble, y su gente respeta la tradición, por eso los Patios de Córdoba es uno de los lugares al que debemos ir sin duda.
No todo es mirar
¿De qué sirve tanto caminar si no paras a comer algo? Córdoba es famosa por sus platos que te dejan el alma feliz. El salmorejo es obligatorio, igual que el flamenquín, ese rollito de carne relleno que te arregla cualquier día. Y no te olvides del rabo de toro, que aunque suene raro, es un manjar.
Para los más golosos, no te vayas sin probar los pastelitos típicos, como los alfajores o los pestiños. Y todo esto, por supuesto, regado con un buen vino Montilla-Moriles.
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