Ese cuerpo explicó que en la instalación industrial, situada en el oeste de Portugal, se extraía, transformaba y empaquetaba la droga
La Policía Judicial de Portugal anunció este jueves el desmantelamiento de uno de los mayores laboratorios de droga en Europa en una operación que resultó también en la detención de siete hombres y la incautación de 1.500 kilogramos de cocaína.
Ese cuerpo explicó que en la instalación industrial, situada en el oeste de Portugal, se extraía, transformaba y empaquetaba la droga.
Como resultado de esta investigación, la Policía Judicial ha desarticulado un grupo criminal "altamente organizado" que se dedicaba a introducir grandes cantidades de esa droga, traída de Colombia, en Europa.
Las fuerzas lusas detallaron que las pesquisas se iniciaron a raíz de un intercambio de información, en el marco de la cooperación internacional con los cuerpos de Policía Nacional de España y Colombia, y de EE.UU., como las agencias antidroga DEA y de protección de aduanas y fronteras CBP, y la sección de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional.
Gracias a esa información, en mayo pasado la policía portuguesa decomisó 986 kilos de cocaína transportados en un contenedor marítimo escondidos en el fondo de cajas de plátanos procedente de Colombia y que llegó a Portugal por el puerto de Setúbal.
Durante la investigación, las autoridades identificaron a los responsables del transporte de la cocaína y a otros sospechosos, con lo que lanzaron 20 órdenes de registro y cuatro de detención, que se cumplieron el martes pasado.
En uno de los almacenes que fueron registrados estaba en pleno funcionamiento un laboratorio industrial, donde la policía se incautó de 460 kilogramos de cocaína ya procesada y de 32,5 kilos en proceso de transformación.
En ese local había tres hombres que fueron arrestados in fraganti y fueron decomisadas dos armas de fuego, una máquina de prensar, productos químicos y una gran cantidad de dinero en efectivo.
En total la operación, bautizada como 'Pacoba' (de pakova en guaraní, que significa banana), terminó con la detención de siete sospechosos -cuatro portugueses, dos colombianos y un marroquí- y la confiscación de 1.478,5 kilos de cocaína, tres armas de fuego, elevadas cantidades de dinero, varios vehículos ligeros y pesados, y la desarticulación del laboratorio.
Las investigación prosigue, pero entretanto se espera que los detenidos, que tienen entre 29 y 56 años, comparezcan ante las autoridades judiciales para que se les interrogue y se les apliquen medidas cautelares.