El Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga ha dictado un auto por que deja en libertad bajo fianza de 5.000 euros al joven que fue detenido.
El Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga ha dictado un auto por que deja en libertad bajo fianza de 5.000 euros al joven que fue detenido por su implicación en un homicidio cometido en marzo después de que contara el suceso por su móvil mientras huía en un autobús con destino a Madrid.
Esta resolución fue recurrida por la acusación particular al entender que existía riesgo de fuga al tratarse de un extranjero en situación irregular en España y que ya había intentado escapar, algo que impidió un policía de paisano que escuchó su conversación en el autobús.
La Audiencia Provincial de Málaga ha avalado la decisión del juzgado y ha desestimado el recurso, aunque con el voto particular de un magistrado, que indica que existe "un elevado riesgo de que el imputado pueda eludir la acción de la Justicia, peligro que deduce del hecho de que sea de nacionalidad uruguaya sin permiso de residencia en nuestro país (tiene incluso una orden de expulsión en vigor)".
Este voto particular, al que ha tenido acceso Efe, señala que los indicios de criminalidad en contra del encausado "son claros y especialmente la conversación que mantuvo en el interior del autobús", donde afirmó que había apuñalado y matado a una persona.
Además, el magistrado destaca que por ello se le imputa un delito consumado de homicidio, que podría tratarse incluso de un delito de asesinato con la agravante de abuso de superioridad.
El crimen fue cometido por el acusado el 12 de marzo de 2011 en la Plaza Murillo Carreras de Málaga cuando un hombre fue apuñalado al parecer en venganza por un incidente ocurrido la noche antes en una discoteca.
El voto particular señala que los indicios de criminalidad en contra del encausado "son claros y resultan de las distintas declaraciones prestadas por testigos y coimputados", y "muy especialmente" de su conversación en el interior del autobús.
También recuerda que el encausado ha admitido pertenecer a los "Latin King", grupo conocido por sus actitudes violentas, y subraya que tras perpetrar los hechos se marchara al saber de la detención que los otros encausados, lo que evidencia que con anterioridad intentó evadir a la Justicia.