Mansour Konte, el joven de 18 años de Guinea-Conakri que llegó en patera a Canarias y que en Málaga se ha convertido en héroe al salvar a una mujer del agua durante la dana, ha logrado varias ofertas de trabajo tras hacerse famosa su hazaña y además ha podido reencontrarse con su rescatada, Cristina.
En torno a una decena de propuestas laborales le han llegado, una de ellas desde León, y son analizadas dada su situación de solicitante de asilo y estar incluido dentro de un programa de acogida y acompañamiento social con la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR).
En concreto, la oferta de León proviene de la empresa World Panel 2021, firma que lleva tres años operando desde Cubillos del Sil (León), haciendo paneles tipo sándwich destinados a la construcción.
Su director, Luis Villafañe, reconoce que le conmovió el gesto del joven que conoció por el vídeo. “Esa determinación y voluntad es la que queremos, por eso no lo dudo, queremos que trabaje con nosotros”, ha declarado a la Agencia EFE.
Villafañe tiene la esperanza de que Mansour acepte la propuesta para participar de su empresa, que cuenta con 26 empleados y en su mayoría jóvenes inmigrantes, fundamentalmente de países latinoamericanos pero también subsaharianos.
Por su parte, fuentes de CEAR han explicado a EFE que su Servicio de Orientación Laboral estudia qué aconsejar a Mansour, si se trata de opciones reales y si una aceptación podría perjudicarle, dado que el programa de acogida implica unas determinadas condiciones.
La aceptación del puesto puede influir en el tipo de apoyo que recibe y se analiza si implicaría su salida del referido programa, además de tenerse en cuenta su juventud, aunque apuntan que la última palabra la tiene Mansour.
Él también estudia junto a otras personas de su entorno las ofertas y confiesa a EFE que le atrae marchar a León, aunque a la vez tiene dudas si podría finalmente incorporarse al puesto de trabajo, al carecer de la documentación precisa, por lo que cree que primero hay que "arreglar los papeles".
Quiere trabajar
Explica que lleva mucho tiempo sin trabajar y formándose, y que por ello el impulso es ir en busca del puesto. "Tengo miedo", explica, de aceptar el trabajo y cuando salga de su actual casa no pueda volver a ella, pero desea, a la vez, acceder al empleo.
También recuerda que alguna vez le propusieron un trabajo y que le arreglarían los papeles, pero después fue mentira.
Mansour, que desconocía previamente a la mujer que rescató, se la encontró en su barrio cuando ella caminaba junto a su madre y Cristina advirtió a esta que él era el muchacho que le ayudó, le dieron la mano amablemente y le agradecieron su acción.
Días después de la hazaña, una vecina recordada este martes cómo Mansour apartaba contenedores de la calle en plena acumulación de agua por las fuertes precipitaciones del pasado miércoles, mientras él se despide camino a casa con un "mucha suerte".
El joven, en espera de que se resuelva su petición de asilo y que llegó a España por la Ruta Canaria, considerada de las más peligrosas, vio que una mujer de unos 40 años no podía terminar de cruzar una amplia calle de la capital malagueña que estaba con muchísima agua y que se había quedado parada sin poder avanzar.
Se adentró rápidamente en el ancho río en que se transformó la vía, de tres carriles, y llegó hasta ella para tenderle su mano y juntos continuar el recorrido.
Ella llorando le respondió que no podía andar, por lo que optó por cogerla en brazos y trasladarla, según relató, hasta donde ella ya pudo continuar su camino. Él vio que la situación en la que estaba ella era "muy peligrosa" y la sacó de allí.