El empresario acusado por tener a ocho subsaharianos sin contrato trabajando en su invernadero ha aceptado una pena de un año de cárcel y una multa de 720 euros tras reconocer los cargos que le imputaba la Fiscalía durante la vista oral celebrada este lunes en la Audiencia de Almería.
El procesado ha mostrado su conformidad y reconocido los hechos después de la rebaja de penas realizada por el fiscal, que inicialmente pedía dos años y tres meses de prisión, además de una multa de nueve meses, a razón de nueve euros al día, por un delito contra los derechos de los trabajadores.
También se ha acordado la suspensión de la pena de cárcel durante dos años, a condición de que no vuelva a delinquir en este periodo.
En su escrito de acusación, al que ha tenido acceso EFE, el fiscal indica que la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Almería llevó a cabo en la mañana del 25 de enero de 2021 una inspección en un invernadero ubicado en el paraje del Nazareno de Níjar (Almería).
Los inspectores comprobaron que en esta explotación había ocho varones subsaharianos que trabajaban para la empresa administrada por el acusado, que huyeron del lugar al verlos y a los que el procesado, presuntamente, no había dado de alta en la Seguridad Social.
El fiscal precisa que la empresa del acusado sí que tenía dados de alta a otros cuatro trabajadores, si bien asevera que ninguno de ellos se encontraba en la finca dicho día.
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