Su prohibición en época estival no ha sido bien acogida por el colectivo
La playa de Valdelagrana acogió el pasado fin de semana la exhibición correspondiente al primer circuito del tour nacional de kitesurf, que se viene realizando por distintos puntos de la geografía española. Las playas de las ciudades de Murcia, Santander, Tarragona, Valencia, Málaga, Alicante y El Puerto, están sirviendo de escenario ideal para la acogida de la práctica del kitesurf.
Bajo la organización de División Náutica a las pruebas realizadas en el mar, le siguieron otras teóricas con camas plásticas, movimientos en el aire, saltos y giros. De igual modo, se realizó la modalidad race que recientemente ha sido acogida como disciplina olímpica y que estará presente en las próximas Olimpiadas de Londres 2012.
La expectación, una vez más, fue acorde a la vistosidad que genera este deporte aunque el acotamiento de tan sólo 15 metros hizo que la comodidad de los participantes se viera empañada por los bañistas.
A pesar de ello y del escaso viento que reinaba en la zona, la acogida estuvo a la altura de la expectación de una modalidad, que continúa en expansión.
Prohibición incomprendida
Tal y como publicase este medio días atrás en lo referente a la prohibición del kitesurf durante la estación estival, las reacciones a las normativas municipales y autonómicas a la imposibilidad de la práctica de este deporte hasta el 15 de septiembre no se hicieron esperar. Como era de esperar no ha sido bien recibida por parte de una comunidad que no entiende cómo no se encuentra la compatibilidad a una disciplina en auge y que no sólo fomenta la práctica deportiva, sino ayuda positivamente a la economía de la zona al ser un aliente más al abanico turístico portuense.
De igual manera, resulta paradójico cómo en la Oferta Educativa Municipal (OEM), el kitesurf fue con diferencia el deporte estrella tras la buena acogida en los distintos centros escolares, llegando a aglutinar a 1.500 niños, que con clases teóricas se vieron atraídos por una modalidad que empieza a calar con fuerza entre los más jóvenes.
Las restricciones van más allá a lo estrictamente municipal, dado que la Consejería de Medio Ambiente considera incompatible esta práctica al coincidir con la nidificación de las aves de la zona del parque metopolitano de Los Toruños.
La prohibición también afecta al fly sur, aunque, en cambio, otros deportes tendrán limitada su práctica como el surf o el windsurf, que estarán permitido a unas cuantas horas en todo el litoral. De hecho, sólo se podrá practicar de siete a once de la mañana y a más de 200 metros de la orilla. Los riders entienden que hay suficiente concienciación y respeto a bañistas y fauna, como para prohibirse y máxime en plena estación estival.