Es la undécima victoria seguida de Alcaraz, que no conoce la derrota desde que fue eliminado en segunda ronda en el Abierto de Estados Unidos
Carlos Alcaraz encontró en el chino Yibing Wu, 560 de la ATP e invitado al torneo, un obstáculo más alto de lo esperado, aunque logró finalmente superarlo por 7-6 (5) y 6-3 y clasificarse para los octavos de final del Masters 1.000 de Shanghái.
El número 2 del mundo, ganador hace apenas cuatro días del Abierto de China, no se despegó de Wu en todo el primer set, que resolvió con no pocos apuros en el desempate, tras verse 3-1 por detrás.
En el segundo set, los juegos fueron también cayendo sin opción de 'break' hasta que Alcaraz rompió para 4-2 y negó al tenista local cualquier opción de recuperarse en los siguientes compases.
Wu, primer jugador chino que se llevó un título ATP (Dallas 2023), ha atravesado una larga serie de lesiones y ocupa un lugar en el ránking muy inferior al que demuestra su juego. En la anterior ronda se había deshecho del chileno Nicolás Jarry, 29 del mundo.
Es la undécima victoria seguida de Alcaraz, que no conoce la derrota desde que fue eliminado en segunda ronda en el Abierto de Estados Unidos.
Su rival en cuartos saldrá del choque entre los franceses Gael Monfils y Ugo Humbert.
Alcaraz se unió en la lista de octavofinalistas de Shanghái al número uno mundial, el italiano Jannik Sinner, y al quinto, el ruso Daniil Medvedev, que necesitaron tres sets para clasificarse.
Sinner ganó al argentino Tomás Etcheverry, que se entregó durante dos horas y 40 minutos antes de caer por 6-7 (3), 6-4 y 6-2.
Daniil Medvedev firmó una victoria tensa sobre el italiano Matteo Arnaldi por 5-7, 6-4 y 6-4 en dos horas y 45 minutos. El moscovita perdió los nervios en varios momentos del partido y la emprendió contra el juez de silla, el supervisor de la competición, los recogepelotas y la calidad de las bolas y fue advertido y penalizado con un punto.
El programa de este domingo se presentaba muy cargado por la necesidad de recuperar los partidos aplazados la víspera por la lluvia, pero el tiempo no ha cambiado y las pistas exteriores siguen inutilizables.