Según una nota de prensa del Gobierno gibraltareño, se trata de R.A.P.B., residente en Chiclana de la Frontera, y de Y.G.M., residente en la Línea de la Concepción, ambos de nacionalidad española, que fueron detenidos el Viernes Santo cuando estaban a punto de salir de la colonia en una autocaravana.
Los funcionarios de la Aduana registraron el vehículo y en él en contraron medio millón de cigarrillos escondidos en los armarios, el aseo y otros espacios del mismo, por lo que sus dos ocupantes fueron detenidos e ingresaron en prisión preventiva.
Los dos ciudadanos comparecieron este jueves en el juzgado, que les declaró culpables de posesión y transporte ilegal para la exportación de tabaco en cantidades comerciales, por lo que fueron condenados a pagar de inmediato los mencionados más de 28.000 euros o, en su defecto, a 180 días de prisión.
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