Los ataques aéreos y de artillería del Ejército israelí por tierra, mar y aire sobre la Franja de Gaza han dejado cerca de 50 palestinos muertos y al menos 94 heridos en el día 331 de guerra, informó este domingo el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás.
La cifra de muertos alcanza ya los 40.738 y la de heridos a 94.154, desde el estallido de la guerra el pasado 7 de octubre. Además, miles de cuerpos siguen bajo los escombros sin poder ser rescatados por los equipos de emergencias y la defensa civil debido a la intensidad de los bombardeos.
La ciudad de Gaza, en el norte del enclave, fue uno de los objetivos de los aviones de combate israelíes a lo largo de la mañana de este domingo, y los bombardeos sobre dos casas dejaron a un niño y un adulto muertos y a varios civiles heridos, según la agencia oficial de noticias palestina, Wafa.
El barrio de Shujaiya de la capital gazatí fue otro de los blancos alcanzados por las fuerzas aéreas hebreas, que mataron a una persona e hirieron a varias más.
El fuego de la artillería se cobró la vida de otro palestino en el campo de refugiados de Bureij, en el centro de la Franja, reporta Wafa.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) inició este domingo la primera fase de la campaña de vacunación contra la polio en el enclave, que se prolongará hasta el miércoles 3 de septiembre con pausas humanitarias de ocho horas diarias pactadas entre Israel y Hamás.
La Oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reiteró ayer en un comunicado su voluntad de colaborar en esta campaña para evitar un brote de la polio en la Franja, pero recordó que estas pausas humanitarias no representan un alto el fuego general.
A Gaza han llegado 1,26 millones de dosis de la vacuna oral (dos gotas en esta primera fase de la inmunización), así como el equipamiento para garantizar la cadena de frío, con el objetivo de inmunizar a 640.000 niños menores de diez años y alcanzar una cobertura del 90 % para detener el brote actual de polio.
Las fuertes lluvias que se han registrado hoy en el enclave agravan las condiciones en las que viven los 1,9 millones de desplazados, muchos de ellos en tiendas de campañas improvisadas, aumentando los temores entre la población de brotes de más enfermedades.
La ofensiva israelí ha provocado el desplazamiento forzado de casi la población total de la Franja y ha dejado parte del enclave inhabitable.
Por otra parte, el Ejército confirmó este domingo haber recuperado los cadáveres de seis rehenes que Hamás mantenía cautivos en un túnel subterráneo en el área de Rafah (sur), y confirmó su retorno a territorio israelí.
Ahora, son 97 los rehenes (al menos un tercio ya muertos) que quedan en manos del grupo islamista desde que perpetró su ataque contra Israel el 7 de octubre, que dejó unos 1.200 muertos y 251 secuestrados.
El Foro de Familias de los Rehenes reprochó a Netanyahu que solo ocho rehenes han sido rescatados con vida en operaciones militares, en comparación con los 105 liberados en el único acuerdo de tregua en noviembre, a cambio de la liberación de 240 palestinos presos en cárceles israelíes.
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