De Paz ha transmitido a los representantes de la FOE que el propósito de esta medida del Gobierno andaluz “es conseguir que empresas que, siendo viables, recuperen su solvencia técnica y económica en una situación de crisis coyuntural que por sí mismas serían incapaces de superar”.
No existen limitaciones en cuanto al tamaño de los negocios, que únicamente deberán tener su sede social o establecimiento operativo principal en Andalucía y encontrarse en alguno de los supuestos que la Unión Europea entiende como ‘situación de crisis’, según vienen recogidos en la directiva sobre ayudas estatales de salvamento y de reestructuración de empresas en crisis. Asimismo, la delegada ha indicado que hay sectores que, en cumplimiento de la normativa europea, no pueden acogerse a este tipo de ayudas, como la industria del carbón y la siderúrgica. Lo mismo ocurre con empresas de nueva creación surgidas de la liquidación de otra anterior o de la absorción de sus activos.
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