JxCat ha restado valor al preacuerdo entre ERC y PSC y ha remarcado que los objetivos que plantea, como el concierto económico, pueden alcanzarse mediante las negociaciones abiertas para dar estabilidad al Gobierno de Pedro Sánchez, sin necesidad de investir a Salvador Illa como presidente catalán.
Tras semanas manteniendo un perfil bajo para no irritar a ERC, Junts ha roto este martes su silencio en un comunicado de dos páginas en el que argumenta su rechazo al preacuerdo para investir a Illa, aunque subraya su "absoluto respeto" hacia la decisión que tomen las bases republicanas en la consulta del viernes.
JxCat destaca su esfuerzo por no "interferir en el debate interno de ERC", incluso ahorrándose comentar las "cuestionables campañas de comunicación" de los republicanos, como la polémica de los carteles contra el alzhéimer, pero una vez hecho público el contenido del pacto para investir a Illa ha querido dejar claro su rechazo.
Tanto los objetivos en financiación como los referidos al "reconocimiento nacional" incluidos en el preacuerdo, advierte Junts, "ya fueron fijados en la negociación" para la investidura de Pedro Sánchez y su cumplimiento depende de la "evolución de las negociaciones bilaterales" de Junts y ERC con el PSOE, aprovechando la fuerza de los independentistas en el Congreso.
Si Illa fuese investido, alerta el comunicado, el cumplimiento pasaría a depender de "una negociación bilateral entre un Gobierno español presidido por el PSOE y un Govern catalán presidido por el PSC y apoyado por ERC en el Parlament", por lo que serían Sánchez e Illa los "encargados de desplegar los acuerdos" en financiación, lengua catalana o reconocimiento nacional.
Para Junts, el preacuerdo "asume en la práctica el marco político" del PSC y de un Illa que, en su opinión, "ha sido siempre el más favorable a la represión" contra el independentismo, "el menos comprometido con la lengua catalana" y "no ha expresado nunca ningún interés ni voluntad de influir dentro de su partido para acabar con el insostenible maltrato económico y nacional por parte del Estado".
La "convención nacional para la resolución del conflicto político" prevista en el preacuerdo, advierte JxCat, asume el relato del PSC según el cual hay "un conflicto entre catalanes" que debe resolverse en una "mesa catalana", en lugar de "negociar con el Estado la celebración de un referéndum de autodeterminación".
Junts recuerda que la decisión de investir a Illa "no se podrá revertir" dada la inexistencia de una mayoría alternativa que pueda hacer prosperar una moción de censura, por lo que "todo queda fiado a la voluntariedad de cumplimiento del PSC", que podrá impulsar su agenda de "desnacionalización de Cataluña".
Además, JxCat echa en falta "medidas inmediatas en los presupuestos generales del Estado para 2025 que tengan efectos directos para Cataluña" y, en cambio, el preacuerdo prevé "futuras reformas legislativas inciertas, sin consenso y sin asegurar el objetivo fundamental" del concierto económico, un concepto que, según destaca, no recoge el documento pactado por ERC y PSC.
"Que la Agencia Tributaria (catalana) pueda recaudar y liquidar todos los impuestos, pero el Govern de Cataluña no tenga el poder sobre el dinero recaudado no es soberanía y no evita los incumplimientos del Estado en materia de inversiones y, si fuese el caso, en materia de ordinalidad", señala.
Junts tampoco valora la conselleria de Política Lingüística prevista en el preacuerdo, porque "el problema de la lengua catalana no es de estructura administrativa", sino de "aplicación de la legislación que la determina como lengua vehicular" en la escuela.
Mano tendida a ERC
Para conseguir todos los avances que reivindica el independentismo, añade el comunicado, hay que construir una "estrategia común para exprimir toda la potencialidad de las negociaciones con los socialistas, a partir de la posición determinante" de ERC y Junts en Madrid.
Junts "reitera su propuesta a ERC para hablar de todo, mirando al futuro y rehaciendo confianzas para poder defender mucho mejor los intereses de los catalanes".
"JxCat está preparada para cualquier eventualidad y trabajará con toda la determinación para que nuestro país tenga una fuerza central independentista potente, mayoritaria, libre de servidumbres y completamente independiente de la dinámica de bloques ideológicos que interesa a la política española", concluye.