El Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Andalucía (CODINAN) ha publicado un estudio en el que ha recomendado prohibir la venta de bebidas con un contenido de cafeína mayor de 150mg/L a los menores de 18 años, ya que este tipo de bebidas pueden tener "efectos adversos graves en la población".
Según el estudio, otras medidas que se deberían tomar al respecto son el aumento de los impuestos a este tipo de productos o la creación de un etiquetado para las bebidas energéticas que se sitúe en la parte frontal del producto y disuada a los menores de su consumo.
En Europa, un 68 % de los adolescentes de entre 10 y 18 años consumió bebidas energéticas en el último mes analizado por el estudio, mientras que en torno a un 24 % consumió una cantidad superior a siete litros al mes, lo equivalente a 28 latas de 250 ml, según la organización.
El 62 % prefiere las bebidas energéticas
En Andalucía, cada vez son más los adolescentes que optan por el consumo de las bebidas energéticas, según los datos más recientes.
Según CODINAN, en España país más del 40 % de los jóvenes ha consumido recientemente este tipo de bebidas y un 62 % de los adolescentes las prefieren frente a otras bebidas.
El estudio ha señalado una relación entre el consumo de bebidas energéticas y un aumento del riesgo de padecer obesidad, alteraciones de la composición corporal, problemas cardiovasculares, hipertensión e incluso cierta influencia en el comportamiento, la atención o daños neurológicos si se toman en grandes cantidades.
CODINAN ha propuesto a través del estudio la regulación desde las entidades píblicas en la venta de estos productos, que tienen un precio "accesible" de entre 1,5 y 3,5 euros que favorece su consumo, la prohibición de la publicidad de bebidas energéticas dirigida a niños y adolescentes menores de 18 años y la puesta en marcha de programas de salud pública que alerten de los riesgos de estas bebidas.
Andalucía, pendiente de regulación
Galicia ha sido la primera autonomía en regular al respecto. La Xunta de Galicia anunció en 2023 que estudiaría la prohibición de la venta de este tipo de productos a los menores de 18 años, un sector de la población que, según el Ministerio de Sanidad y la Asociación Española de Pediatría, no debería consumir este tipo de productos.
Las comunidades que han seguido sus pasos han sido Aragón, Baleares, Castilla- a Mancha, Navarra y el País Vasco, cuyos gobiernos regionales prevén la regulación de estas bebidas. En Castilla y León y la Comunidad Valenciana continúan con los análisis para abordar la cuestión.
En Andalucía, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, anunció el pasado noviembre la creación de un grupo de trabajo en el Parlamento sobre un plan de prevención de adicciones en la infancia y la adolescencia, que comenzaría en 2024 y en el que se incluiría la prohibición en la comunidad la venta de bebidas energéticas a menores de edad.
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