Iberia tacha de “falso” este argumento y asegura que los pilotos ya sabían que su representante estaba de servicio cuando se acordó la fecha. Iberia acumula 350 cancelaciones y más de 3.000 retrasos en estos días.
En este contexto, ayer solicitó ante la Audiencia Nacional las actas de las asmableas del Sepla para demostrar que hay huelga de celo, y no hace falta contratar a más pilotos.
Anulada la reunión entre Iberia y los pilotos.
Estos han alegado que sus portavoces están de servicio y que no podían acudir a la cita de ayer.
El representante de los pilotos precisó que la dirección de Iberia “sabía desde la semana pasada que los jefes sindicales volaban” porque no pudieron cambiar sus turnos para acudir a la reunión al tratarse de fechas sensibles que los pilotos “sortean”, por lo que ningún compañero podía cambiarles estos servicios.
El Sepla insiste que sus representantes no pudieron acudir a la reunión por obligaciones laborales y reitera que los retrasos y cancelaciones no se deben a una huelga encubierta de pilotos, sino a la falta de pilotos y a problemas de gestión.
El jefe de la sección sindical de Iberia, Justo Peral, tenía que cubrir una ruta hacia Guatemala, algo que sucede con otros representantes implicados en las negociaciones, que también tenían vuelos programados.
Los pilotos aseguran que han planteado “otras fechas a la dirección de Iberia”, lo que, a su juicio, pone de manifiesto que “no hay una huelga de celo” porque los propios representantes sindicales “están trabajando” y son los que deberían haber convocado el supuesto paro.
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