El pleno extraordinario para la aprobación del procedimiento abierto para la contratación de la gestión del servicio público de transporte urbano de viajeros en la ciudad no estuvo exento de cruce de acusaciones de una y otra parte, pero finalmente fue aprobado, contando con el apoyo del equipo de Gobierno así como el grupo mixto. Se da así el primer paso para acabar con 24 años de gestión del servicio por parte de GDF, que en el último año y medio obligó a los bancos a quedarse con la empresa y al Ayuntamiento a hacer frente a esta difícil situación.
La oposición hizo valer distintos argumentos para rechazar un pliego que les parece “poco participativo y consensuado”, y además, entienden, por lo que reconocen en sus intervenciones que “maltrata a los trabajadores”.
Ante una primera exposición por parte de la edil de Medio Ambiente, Blanca Merino, el edil de IP José Manuel Peinado admite que “nosotros queremos tener la seguridad del mantenimiento de los puestos de trabajo y dejamos claro que no es nuestro pliego, porque no ha sido participativo ni consensuado”, además de “estar cogido con alfileres y no imprimir ninguna novedad arriesgada”. La portavoz de IU, Pepa Conde, refrenda esta idea, entendiendo que en las reuniones hubo visión aperturista que se quedó en papel mojado.
El edil socialista David de la Encina indica que es uno de los pliegos más “complejos, junto al de la limpieza pública”, y en cambio se han tomado no más de unos meses “cuando han tenido cuatro años para la renovación”, por lo que entiende que las prisas han contribuido a que haya muchas cuestiones que se podrían haber mejorado.
Polémica surgió por el lugar en el que quedan los trabajadores. Como ya anunciara la edil de Medio Ambiente y repitiera ayer, se habla de la subrogación de los 50 fijos en plantilla (que no es una obligación, como indicaran técnicos municipales, pero que ha sido un reto del equipo de Gobierno), así como de incluir aquellas reivindicaciones que quedaron recogidas en Sercla hace un año y medio y que no estaban en sus contratos y se respeta la antigüedad adquirida con los años. En cuanto al hecho de poder hacer más o menos en relación a la firma de un convenio local y no provincial, por el que se rigen ahora los trabajadores, estima que se abre una puerta a la negociación colectiva entre las partes legitimadas, empresa y empleados, aunque IP entiende que se podría haber forzado más a la empresa interesada en negociar con la plantilla una vez acepte hacerse cargo del servicio.
El gasto, en entredicho
Pero al PSOE tampoco le gusta el gasto que supone el pliego, hablando de “21 millones de euros, 3.500.000 euros al año”, hablando además de una promesa que se hizo a los 50 fijos que no se ha recogido. De la Encina además entiende que el pliego no resuelve “el trasbordo, la frecuencia de paso, porque no es lógico que los autobuses de la línea 5 se tarden 80 minutos o los fines de semana la circunvalación tarde 40 minutos”. Merino se defiende insistiendo en que las opciones eran eliminar líneas, despedir a parte de la plantilla o subir el precio del billete”, opciones que no se barajan, por eso considera que si para la oposición no son medidas valientes, les invita a decir qué hubieran aceptado o no ellos en su posición. En cuanto a la petición socialista de la contención del gasto, hubiera pasado por el despido, por lo que Merino quiere hacer valer la postura sensata tomada.
Conde acusa al equipo de Gobierno de “no escuchar las sugerencias de los trabajadores”, respondiendo la edil popular que “si opina eso es porque no se ha leido el pliego, si no sabría que la base son los trabajadores”, pero insiste en que “no ha parado de manipular a los trabajadores, prometiendo lo que no se puede cumplir y dando apoyo a cuestiones sociales como que tenga ventaja para entrar en plantilla quien ya tenga otro trabajador dentro que no son lógicas. Ustedes han prometido imposibles y nosotros hemos subido el sueldo un 12%”. Además de cuestionar el respeto de la responsable de Medio Ambiente hacia la plantilla, Conde insiste en que “les han traicionado y ahora se cree la salvadora”. Apoyando esta línea, De la Encina destaca que el apoyo a los trabajadores se nota, con ironía, en que “se da tres puntos sobre cien a la empresa para incentivar a los trabajadores, menos que por un túnel de lavado”.
Pero en cambio el equipo de Gobierno tiene muy clara su postura y su apuesta por la plantilla.
Continuista
Pepa Conde define el pliego de “continuista, por lo que no hay intención de sentar las bases para un pliego que diera movilidad real a la ciudad y una respuesta a las necesidades en materia de transporte”. Indica que se mantiene “el mismo chiringuito con gestión interesada”, cuando otra opción, insiste, es la municipalización, desmontando esta medida Merino indicando que el 95% de los municipios con menos de 500.000 habitantes asumen la gestión por la que opta este pliego, la interesada.
Para el concejal andalucista Antonio Jesús Ruiz, el pliego supone cambios, señalando que “supone un punto de inflexión” después de todo el proceso vivido y protagonizado por empresa y plantilla en los últimos años. El andalucista explica que “se opta por la fórmula intermedia y acertada para que se presenten empresas interesadas y haya concurrencia”. Insiste en que no era posible “adoptar la concesión a riesgo y ventura mientras que tampoco es aconsejable en este momento optar por la municipalización”, que es lo que solicita Izquierda Unida. El edil del PA señala que “habrá que trabajar para generar una mayor confianza de los portuenses en este servicio para aumentar con ello el número de usuarios, así como de las frecuencias”, insiste el edil.
La Flave asegura que no se ha respondido a sus sugerencias
Pero a este conflicto nacido entre oposición y equipo de Gobierno se unen otras voces, como pueda ser la de la Flave, que en comunicado de prensa admite no conocer cuáles son las razones por las que el área de Medio Ambiente ha admitido o rechazado algunas de sus propuestas, puesto que enviaron el documento a la edil del ramo pero no ha habido ni siquiera una llamada o una reunión para confirmar que las propuestas realizadas se hayan tenido en cuenta o por el contrario no hayan sido las indicadas para el pliego que ayer se llevó a aprobación a la sesión plenaria extraordinaria. A pesar de todo, la federación lleva meses confirmando que su junta directiva trabajaba en este asunto, entendiendo de vital importancia que el vecino, que es una de las partes, junto al trabajador, que mejor conoce el servicio y sus carencias así como posibles soluciones, pudiera aportar su granito de arena a un proceso que es bastante importante, puesto que el pliego aprobado tiene una duración prevista de cinco años más uno de prórroga, lo que significa bastante tiempo para que se aten todos los cabos posibles.
