La multinacional estadounidense Celgene, una de las tres primeras corporaciones biotecnológicas del mundo, inauguró ayer en Sevilla el Instituto Celgene para la Investigación Translacional de Europa (Citre en sus siglas en inglés) en el que tiene previsto invertir 45 millones en tres años.
Citre, que se ubica en el parque científico Cartuja 93, coordinará la investigación biomédica Celgene en Europa e inicia sus trabajos con cinco laboratorios especializados en investigación celular para desarrollar terapias avanzadas para patologías como el cáncer y enfermedades raras.
“Este centro nace como punto de anclaje para toda Europa de nuestra empresa, que ha materializado una visión global de la investigación biotecnológica translacional”, ha destacado el presidente de Celgene, Tom Daniel.
Una de las características de esta multinacional, que empleará en Citre a unos treinta científicos “de altísima cualificación” tanto de España como de otros países, es su apuesta por la investigación translacional, aquella que pretende trasladar lo antes posible la investigación básica a la práctica clínica.
Por ello, Citre colaborará con centros de investigación y hospitalarios del sistema sanitario público andaluz que le ofrece 8 millones de usuarios potenciales para ensayos clínicos y una de las más potentes infraestructuras biomédicas de Europa.
Citre colaborará con algunas investigaciones de terapia celular iniciadas ya por Celgene en Estados Unidos, entre ellas la que utiliza células madre obtenidas de la placenta humana -la denominada línea celular DPA-001- que ha despertado importantes expectativas para la regeneración de sistemas inmunológicos deficientes o de tejidos dañados.
“Celgene ha apostado desde hace un década por investigar la capacidad regenerativa de la placenta humana, un tejido que, como se demuestra durante el embarazo, tiene unas grandes propiedades médicas y no causa ningún tipo de rechazo en trasplantes”, según el doctor Robert Hariri, del Celgene Cellular Therapeutics.