Destacó que "Emiratos se niega a involucrarse en cualquier plan destinado a cubrir la presencia israelí en Gaza"
Emiratos Árabes Unidos (EAU), que reconoció a Israel en 2020, denunció este sábado unas "declaraciones" del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en las que -dijo- llamó al país árabe a participar en la administración de Gaza tras la guerra, y consideró que el israelí "no tiene capacidad legal para hacerlo".
"EAU denuncia las declaraciones del Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, sobre un llamado al país (árabe) a participar en la administración civil de la Franja de Gaza, que se encuentra bajo ocupación israelí", dijo el ministro de Exteriores emiratí, Abdala bin Zayed, en su cuenta oficial en X.
Destacó que "Emiratos se niega a involucrarse en cualquier plan destinado a cubrir la presencia israelí en Gaza", según su mensaje en X, reproducido también por la agencia oficial de noticias emiratí, WAM.
Subrayó, asimismo, que su país "estará plenamente preparado para brindar todas las formas de apoyo (...) cuando se forme un Gobierno palestino que satisfaga las esperanzas y aspiraciones del hermano pueblo palestino y goce de integridad, competencia e independencia".
Emiratos es uno de los aliados claves de Estados Unidos en el golfo Pérsico, y mientras no dispone de buenas relaciones con el grupo islamista palestino Hamás que expulsó a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de Gaza en 2007, firmó la paz con Israel en 2020 gracias a los "Acuerdos de Abraham".
Desde esa fecha Emiratos Árabes ha dado importantes pasos de acercamiento con el Estado judío, en especial en los ámbitos económico y comercial, si bien sus lazos se han visto enfriados debido a la guerra israelí en Gaza, que dio muerte a alrededor de 35.000 habitantes de la franja.
Bin Zayed recibió el pasado 2 de mayo en Abu Dhabi al líder de la oposición israelí, Yair Lapid, a quien subrayó la necesidad de impulsar "un horizonte político serio" para resolver el conflicto en Oriente Medio, y dar prioridad a un alto el fuego en Gaza, en un momento en el que crecen las presiones internas y externas sobre Netanyahu.