En un movimiento que busca
asegurar la paz social durante su mandato, la alcaldesa de Jerez,
María José García-Pelayo, ha estampado su firma en una serie de convenios colectivos que, aunque favorecen a los trabajadores municipales, ponen en serio riesgo la sostenibilidad económica del Ayuntamiento, actualmente sumido en una
profunda crisis financiera.
Tal y como afirma Viva Jerez, la estrategia de García-Pelayo, consistente en
mejoras laborales que han sido bien recibidas por los colectivos de trabajadores, esconde una realidad más compleja y posiblemente problemática para el futuro económico de Jerez. A pesar de las
reiteradas garantías de la alcaldesa sobre la viabilidad de estos compromisos, la realidad parece ser otra. Los números hablan por sí solos: se proyecta un
incremento de 12,5 millones de euros en el coste del personal municipal, una cifra que amenaza con agravar aún más la
precaria situación financiera de la ciudad.
Este aumento se distribuye en varios frentes. Por un lado, en Comujesa, el servicio de ayuda a domicilio verá incrementados sus costes en
casi 1,5 millones de euros, destacando especialmente los
1,3 millones de euros destinados a complementos. Por otro lado, el servicio de transporte urbano no se queda atrás, con un estimado de
643.000 euros adicionales en gastos laborales.
Sin embargo, la medida que se aplica de manera generalizada es el incremento salarial del
2,5%, conforme a lo establecido por la Ley General de Presupuestos del Estado. Este ajuste solo en Comujesa implica un desembolso extra superior a los
800.000 euros, elevando el coste total de personal de esta empresa municipal a más de
2,9 millones de euros, un hecho preocupante considerando que cerró el año fiscal anterior con pérdidas de
2,1 millones.
Pero la situación se torna aún más delicada al examinar el convenio con el personal laboral del Ayuntamiento. Este acuerdo, que también beneficia a los funcionarios, representa un sobrecoste de aproximadamente
9,6 millones de euros. Ya en el pasado ejercicio fue necesario realizar ajustes presupuestarios por valor de
4,7 millones de euros para cubrir gastos no previstos inicialmente, como la implementación de un horario de verano favorable y diversas gratificaciones.
El denominado '
plus de asistencia', incluido en el nuevo convenio, supondrá un desembolso anual cercano a los
3,2 millones de euros. A esto se suman
1,1 millones de euros por el incremento salarial del 2,5% y otros
600.000 euros en concepto de complementos y pluses por servicios extraordinarios, elevando la factura total del incremento de la masa salarial a la mencionada cifra de
12,5 millones de euros.