Cuatro carreteras de Jaén acumulan los siete puntos negros que se registraron en la provincia durante el año pasado, uno más que en 2009, si bien no se repite ninguno de los que con anterioridad habían formado parte de esta clasificación.
Así lo ha indicado a preguntas de los periodistas el jefe provincial de la Dirección General de Tráfico (DGT), Juan Diego Ramírez, en su comparecencia junto al subdelegado del Gobierno, Fernando Calaharro, tras la reunión de la Comisión Provincial de Tráfico y Seguridad Ciudadana de la Circulación que se ha celebrado este miércoles.
Ramírez, que ha dicho que los puntos negros son aquellos en los que producen al menos tres accidentes con víctimas, ha recordado que la provincia viene de una tendencia a la baja en los últimos años desde 25 a 16, diez y seis, en 2009, cuando se logró una cifra "récord".
Según ha añadido, el año pasado se identificaron siete de estas zonas donde se acumulan siniestros, si bien ha llamado la atención sobre el detalle de "no se ha repetido ninguno de los anteriores", de modo que si no se han vuelto a dar en ellos también "algo hemos hecho bien".
Con respecto a los puntos negros en 2010, ha precisado que "preocupan" los tres detectados en la A-44 (kilómetros 40,800 60,800 y 71,500), a los que se suman otros dos en los puntos kilométricos 396 y 214 de la N-322; uno en la salida de Jaén, en Jabalcuz, en la A-6050 que va a Los Villares, y otro en el kilómetro 42 de la A-301, que une la Carolina y Úbeda por El Condado.
CIFRAS POSITIVAS EN ACCIDENTALIDAD
Junto a estos datos, tanto Ramírez como Calahorro han subrayado los datos "francamente buenos" en lo que a accidentalidad en la provincia se refiere, tal y como se ha analizado en la citada comisión, un órgano de carácter trasversal y multisectorial que requiere de la implicación de áreas de diversas administraciones para trabajar en pro del objetivo de promover la seguridad vial y la prevención de siniestros.
El subdelegado ha señalado que esa labor "al final se traduce en datos", de modo que, por ejemplo, los accidentes con víctimas en los últimos cuatro años han disminuido en más de un 36 por ciento, un diferencial que entre 2009 y 2010 fue del -24,54 por ciento. En este sentido, el jefe provincial de Tráfico ha recordado que 2009 fue un año récord y cada vez es más complicado reducir las cifras de siniestralidad, aunque por el momento se sigue consiguiendo.
Así, el año pasado 37 personas fallecieron en accidentes de circulación en vías urbanas e interurbanas frente a las 39 del anterior, lo que supone una bajada del cinco por ciento, porcentaje que aumenta hasta el 15 si sólo se tienen en cuanta los muertos en carreteras, que pasaron de 36 a 32. Al respecto, ha subrayado que lo importante, al margen de que se puedan producir picos, es consolidar esta tendencia de disminución desde 2007 gracias a que se están atacando las principales causas de los accidentes: exceso de velocidad, alcohol y distracciones.
Sobre las carreteras ha dicho, asimismo, que en Jaén no existe ninguna especialmente significativa en siniestralidad, ya que los datos están repartidos, y ha precisado, por otra parte, que las secundarias continúan siendo una prioridad para la DGT, ya que, al igual que en el resto de España, concentran el 75 por ciento de los accidentes. No obstante, junto a la posibilidad de mejora en las carreteras y en los vehículos, ha concretado que tienen como origen los mismos factores humanos. En 2010, hubo en este tipo de vías de la provincia 16 accidentes mortales.
