El secretario general de Asaja-Sevilla, Eduardo Martín, se ha mostrado este martes "más optimista" ante la próxima campaña de riego tras las últimas lluvias, que han caído "repartidas" y "se han podido aprovechar al máximo", al tiempo que ha instado a la clase política a no olvidar las infraestructuras "tan necesarias" para afrontar la sequía.
En declaraciones a Europa Press, Martín ha calificado de "estupendas" y "bienvenidas" las lluvias para el sector agrario después de "varios años consecutivos de tremenda sequía". "Tanto en la forma como en la cantidad de agua que ha recibido el campo ha sido fantástico", ha celebrado.
De esta manera, ha apuntado el "giro importantísimo" que estas precipitaciones han provocado en la situación agraria en Andalucía. "En la regulación general de la cuenca del Guadalquivir rondamos el 36% de su capacidad de almacenamiento y eso es muy importante para la campaña de riego", ha explicado.
Ha beneficiado a todos los cultivos, pero especialmente a la arboleda en general, el olivar y los almendros, y también al algodón, el girasol, el tomate de industria, las hortícolas y la dehesa. "El aporte que da este agua para sacar adelante la hierba tan necesaria y los pastos tan necesarios para el ganado, pues evidentemente es más que bienvenida", ha detallado.
De seguir así, ha apuntado que podría darse una campaña normalizada de riego, lo que vendría a "sacar adelante todos los cultivos" y por eso espera que estas "no sean las últimas lluvias" sino que "sea el inicio de la primavera y, aunque todavía los porcentajes están lejos de la normalidad, pero van dando bastantes señales de que podría ser una campaña normal de regadío".
En este punto, Asaja ha indicado que, con el actual nivel de embalse de la cuenca y tal como establece el Plan Hidrológico del Guadalquivir, las dotaciones de riego serán este año "notablemente superiores a las del pasado, lo que permitirá que los agricultores cuenten con más agua, aunque aún no con una dotación plena".
Eso les permitirá regar sus cultivos arbóreos --frutales, cítricos, almendros y olivos-- y sacar adelante muchos de los cultivos tradicionales de primavera --algodón, tomate o maíz-- e incluso permitirá que esta primavera pueda volver a sembrarse arroz en la marisma de Sevilla, la principal zona arrocera de España, que lleva dos años prácticamente en blanco.
Además, Martín ha detallado que, de seguir las lluvias, se va retrasando la necesidad del riego para sacar adelante los cultivos de primavera. "Contamos con un aporte de humedad importante en la tierra y si se retrasa el regadío, la regulación general se va a ir manteniendo", ha explicado.
Tras esto, ha señalado la necesidad de que los políticos "no se olviden de la necesidad imperiosa de seguir acometiendo las infraestructuras tan necesarias" y "no caer en el defecto de si empieza a llover olvidar que hay un problema".
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