Andalucía

El PSOE confía en Cataluña y Euskadi para superar el mal trago de Galicia y el caso Koldo

Fuentes de Ferraz subrayan que el PSC es ahora mismo la primera fuerza en el Parlament frente a un PP que tachan de "irrelevante"

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  • El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. -

El PSOE afronta con optimismo el nuevo ciclo electoral, sobre todo las elecciones vascas de abril y las catalanas de mayo, en las que parte con una clara ventaja respecto al PP y confía en obtener unos buenos resultados que le ayuden a superar el mal trago de la debacle en Galicia y del caso Koldo.

El adelanto de las elecciones autonómicas catalanas al 12 de mayo ha sido bien recibido por los socialistas, que aseguran estar listos para esta cita electoral, la cual se suma a otras dos ya previstas de aquí al verano: las vascas del 21 de abril y las europeas del 9 de junio.

De hecho, el candidato del PSC, Salvador Illa, acaba de ser ratificado como líder del partido y como cabeza de lista para Cataluña en el congreso celebrado recientemente por la formación, fijado antes de conocerse el adelanto electoral y donde Pedro Sánchez lo reivindicó como un elemento de "unión" entre catalanes.

Fuentes de Ferraz subrayan a EFE que el PSC es ahora mismo la primera fuerza en el Parlament frente a un PP que tachan de "irrelevante" en Cataluña, donde los populares eligieron finalmente como candidato a Alejandro Fernández.

Los socialistas confían en volver a ganar en Cataluña, como acaba de pronosticar el CIS catalán, y tienen además la esperanza de poder gobernar en esta ocasión, pero son conscientes de las dificultades que afrontan al tener como principales rivales a ERC y a Junts con Carles Puigdemont como candidato.

La ley de amnistía que acaba de ser aprobada en el Congreso, y que sigue pendiente de su votación en el Senado, es uno de los temas que los socialistas esperan que les ayude a obtener un mayor respaldo en Cataluña.

No obstante, el PSOE quiere empezar a introducir otros asuntos de debate, sobre todo después de que el Gobierno renunciara a presentar los presupuestos generales de 2024 por el adelanto electoral en Cataluña, y de ahí el reciente registro de una proposición de ley para abolir la prostitución, un asunto que enfrenta a los socialistas con sus socios de coalición de Sumar y el resto de socios parlamentarios.

En el caso de las elecciones vascas, desde Ferraz destacan la capacidad de los socialistas vascos de volver a ser "el partido central de la gobernabilidad en Euskadi" y confían en que su candidato a lehendakari, Eneko Andueza, pueda formar parte de nuevo de un Gobierno de coalición encabezado por el PNV, dada su negativa actual a gobernar junto a EH Bildu.

Al igual que en Cataluña, el PSOE ve "irrelevante" al PP en el País Vasco, y por ello es especialmente optimista en estos dos comicios, pero no tanto en los europeos, donde los socialistas temen que haya un avance de la "ultraderecha" de Vox.

El PSOE aún no ha decidido a su candidato o candidata para las elecciones europeas, en las que suenan los nombres de la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, y del alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Seguridad, Josep Borrell.

A la espera de ver cómo se desenvuelve el PSOE en este nuevo ciclo electoral, lo cierto es que llega en un momento complicado para el partido, que empezó a ver cómo le salpicaba el caso Koldo cuando todavía estaba digiriendo los malos resultados de las elecciones gallegas del pasado 18 de febrero, en las que el PP volvió a ganar por mayoría absoluta.

Por el momento, no hay ningún socialista investigado en este caso, pero uno de los cabecillas de la trama de presunta corrupción por la venta de mascarillas en pandemia es Koldo García, exasesor del exministro José Luis Ábalos, que pasó al grupo mixto del Congreso después de que el PSOE le exigiera entregar su acta de diputado por "responsabilidad política".

El PP centró sus ataques con el caso Koldo en la actual presidenta del Congreso y expresidenta de Baleares, Francina Armengol, a la que pidió su dimisión, y ahora apunta a Begoña Gómez, la mujer de Pedro Sánchez, con la amenaza de Feijóo de investigar las relaciones de esta con Air Europa, empresa que fue rescatada por el Ejecutivo en la pandemia.

Por su parte, el PSOE está contraatacando al PP con la investigación por una supuesta estafa a Hacienda del novio de Isabel Díaz Ayuso, hasta el punto de que Sánchez ha pedido en varias ocasiones a Feijóo la dimisión de la presidenta madrileña por este hecho.

Las acusaciones sobre temas familiares están elevando la tensión del debate político, como se ha podido comprobar en las últimas sesiones de control al Gobierno en el Congreso, y auguran un clima de campaña electoral igual de bronco.

Este panorama preelectoral tan encendido contrasta con la estabilidad del PSOE a nivel orgánico, ya que por el momento no hay previstos cambios en el partido tras los congresos que acaban de ratificar a los nuevos líderes socialistas en la Comunidad Valenciana (Diana Morant) y Extremadura (Miguel Ángel Gallardo). 

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