El presidente del PP-A, Javier Arenas, ha considerado “terrible” que el Gobierno andaluz califique de “batasunos y fascistas” a los funcionarios, y ha pedido al Ejecutivo y a los socialistas que dialogue y que tenga “más humildad” en este asunto de la reordenación del sector público andaluz.
En declaraciones a los periodistas tras visitar un Instituto de Formación Profesional de Sevilla, Arenas criticó las palabras del consejero de Gobernación, Luis Pizarro, en las que dijo que reventar los actos electorales del PSOE y del PP es lo que hace Herri Batasuna en el País Vasco cuando hay elecciones.
“Nunca he visto que nadie busque un acuerdo llamando batasunos o fascistas a sus interlocutores. No lo he visto en mi vida. Es un método de diálogo nuevo, que probablemente nos podrán explicar en todas las escuelas de formación del mundo”, apuntó.
Tras indicar que lo que hace falta es “diálogo todos los días” con los funcionarios, aclaró que el PP no es partidario de que se boicoteen los actos y que él lo sabe muy bien porque todos conocen “las cosas que se han hecho en la sede del PP y quién las hacia”.
Añadió que también sabe quienes pagaban “los autobuses de Astilleros” y cómo durante la huelga general hubo un piquete “del Gobierno municipal”, por lo que reiteró que como él lo sabe no le gusta que “se boicotee ningún acto ni de la Junta ni del PSOE”.
No obstante, reclamó al Gobierno andaluz y al PSOE que tengan “humildad y que dialogue” porque lo que le parece “terrible” es que un Gobierno “llame batasunos o fascistas a sus funcionarios”.
Mientras, la consejera de la Presidencia, Mar Moreno, consideró ayer que es “absolutamente intolerable en una democracia” que una plataforma, “que no tiene ni siquiera la condición de sindicato”, se atreva a “amenazar” a un partido político con boicotearlo en la campaña electoral.
Según la consejera, “los que se han pasado siete pueblos, sin duda, son los que han hecho esa amenaza”. Añadió que hacen daño a todos los trabajadores públicos de Andalucía y que “estén de acuerdo con el decreto o no, no tienen nada que ver con manifestaciones de esa radicalidad” que demuestran “un tic que nada tiene que ver con la democracia”.
Por su parte, la secretaria de Organización del PSOE-A, Susana Díaz, negó ayer que su partido haya tildado de “fascistas” a los funcionarios de la Junta y acusó al PP y a su líder Javier Arenas de “jalear” a los representantes “no legítimos y extremistas” de los funcionarios que “amenazaron” con boicotear la campaña electoral de los socialistas y que “no han pasado” por las urnas sindicales, en alusión a los representantes de la Plataforma de Empleados Público de Andalucía (PEPA).
“En ningún momento ningún dirigente del PSOE o de la Junta ha llamado fascistas a los funcionarios públicos. Sí se ha dicho que hay determinadas personas que se esconden dentro de una protesta legítima, pero que no son representantes legítimos, y que han chantajeado, amenazado y utilizado una protesta para intentar romper las reglas del juego democrático”, explicó.
Las declaraciones, añadió, las tienen que explicar los que “chantajean y amenazan al PSOE con boicotear” la campaña electoral, aunque volvió de nuevo a la figura de Javier Arenas para lamentar que la actitud del PP y su “connivencia” con esos representantes “recuerda a otros tiempos”.
Por último, los secretarios regionales de UGT, Manuel Pastrana, y de CCOO, Francisco Carbonero, criticaron ayer a la plataforma de empleados públicos consideraron que las prácticas de boicot a actos electorales no son “justificables ni admisibles”, ya que “ponen en cuestión las convicciones democráticas” de un Estado de Derecho.
Pastrana hizo un llamamiento a los empleados públicos para que no secunden estas amenazas y aseguró que no una amplia mayoría no comparte ni participa en ese tipo de actuaciones. Carbonero aseguró que CCOO no tiene la costumbre de “reventar actos de partido ni de manifestarse frente al Congreso de los Diputados o el Parlamento de Andalucía” porque en esos órganos reside la soberanía popular.
Safja se desvincula del anuncio de boicot e insiste en derogar el decreto
Por su parte, el Sindicato Andaluz de Funcionarios de la Junta de Andalucía (Safja) se ha desvinculado del anuncio expresado por un portavoz de la Plataforma de Empleados Públicos de Andalucía (PEPA) que anunciaban un boicot a actos de la Junta y del PSOE para protestar en contra del decreto ley de reordenación del sector público aunque ha insistido en la necesidad de su derogación.
En una nota, el Safja ha rechazado “cualquier acción ilegal de protesta” y ha apuntado que lucha “libremente y conforme a la ley por la derogación de los decretazos”. Por ello, se ha desvinculado de las declaraciones vertidas esta semana por la PEPA, referentes a futuros boicots de actos políticos, y ha insistido en que “continúa luchando por la derogación de los decretos, defendiendo así los derechos de sus representados de manera legal, libre e independiente”.
El Safja por tanto hace pública su “desvinculación” de las declaraciones, su rechazo a “cualquier acción violenta o ilegal” y su denuncia a los insultos “inexcusables” del partido gobernante.
Ha dejado claro que Safja “se ha caracterizado por su enraizada lucha libre, legal e independiente por los derechos de los funcionarios públicos y jamás ha pensado en el boicot como forma de protesta, desmarcándose así de las declaraciones difundidas sobre el tema y de cualquier polémica que desvíe la mirada de lo verdaderamente importante, como es la derogación de los decretazos”.