Se cumplen diez años desde que los crimeos decidieron unirse a la Federación Rusa en un referéndum condenado por Kiev y gran parte de la comunidad internacional
El presidente ruso, Vladímir Putin, felicitó el sábado a los dirigentes de la anexionada península ucraniana de Crimea por el décimo aniversario de la "reunificación" con Rusia.
Putin llamó por teléfono al líder crimeo, Serguéi Axiónov, y al alcalde de la ciudad portuaria de Sebastopol, Alexéi Chali, informó el Kremlin.
El sábado se cumplen diez años desde que los crimeos decidieron unirse a la Federación Rusa en un referéndum separatista condenado por Kiev y gran parte de la comunidad internacional.
Previamente, el Ministerio de Exteriores defendió la decisión de los habitantes de la península de "estar para siempre con Rusia".
"Los significativos cambios ocurridos (...) confirman lo correcto que fue la histórica elección hecha por los crimeos hace diez años en favor de la reunificación con Rusia", señala el comunidad colgado en Telegram.
Moscú destacó "el estable desarrollo socioeconómico", pero, según reconoció el presidente del Consejo de Estado de Crimea, Vladímir Konstantínov, la región sobrevive gracias a las "grandes dotaciones" estatales y estima que solo el 30 % del presupuesto regional procede de ingresos propios.
En cuanto a la "sólida paz" en la sociedad crimea, Moscú ha perseguido, procesado y obligado a exiliarse a los principales representantes de la minoría tártara -poco más del 10 % de la población-, que se mantuvo fiel a Kiev hasta el último momento.
El 86 % de los rusos sigue apoyando diez años después la "reunificación" con Crimea, como se conoce en Rusia la anexión de la península ucraniana, según una encuesta difundida esta semana.
El 16 de marzo de 2014 los crimeos, que habían pertenecido a Ucrania desde 1954, recibieron una papeleta con dos opciones -la reunificación con Rusia o mantener el estatus de Crimea como parte de Ucrania- en el marco de un referéndum separatista.
El resultado fue inapelable, un 96,5 % de los crimeos -más del 80 % de los cuales eran rusos étnicos- apoyaron ser parte de la Federación Rusa.
El 18 de marzo el presidente ruso firmó en el Kremlin el tratado de anexión de la península ucraniana y de la ciudad de Sebastopol, base de la Flota del mar Negro.
Tanto políticos crimeos como federales recordaron hoy que la anexión de la península impidió que EEUU estableciera una base naval en el territorio, lo que le hubiera garantizado el control sobre el mar Negro, una amenaza directa a la seguridad de Rusia.
Se espera que Putin acuda el lunes a un mitin en la plaza Roja para conmemorar el décimo aniversario de la anexión, al tiempo que celebra su más que segura reelección este domingo para un quinto mandato presidencial.