Demandar a Ángel Serrano y Delfín Cañas por su gestión al frente del club y por la desaparición de los libros de cuenta; declarar dos partidos de Liga como días del club; y suspender todos los pases a favor con la excepción de los de los jugadores de CAFI, fueron los acuerdos alcanzados en la noche de ayer en la asamblea extraordinaria de socios que se desarrolló durante dos horas en la Casa de la Cultura y a la que asistieron en torno a 150 personas, que aprobaron por mayoría absoluta todas estas medidas.
Además, también se apoyó, sin votación, la puesta en marcha de lo que se denominará como el club de los cien, es decir, buscar a un centenar de empresarios fuertes de La Isla que aporten 500 euros para hacer frente al pago de una nómina, y la condonación de los carnes de manera voluntaria para aquellos socios que quieran entregarlos en el club y pagar un precio especial por sus entradas en los partidos de casa hasta el final de temporada. Una entradas que tendrían que recogerlas en las oficinas y no en el estadio.
La decisión de demandar a los dos anteriores gestores de la entidad obedece a que, tal y como dijo Gonzalo García de Polavieja -asesor jurídico del club-, hay una base legal para reclamarles responsabilidades por la situación económica en la que en la actualidad esta el CD San Fernando tras sus varios años de gestión. Además, tanto Cañas como Serrano prometieron por activa y por pasiva que iban a liquidar la deuda de la plantilla de la temporada pasada y existe un precedente judicial en el Alavés de Pitterman, que también se comprometió a pagar a los jugadores, no cumplió y la justicia le obligó a hacerlo.
El presidente del club, Manuel Acosta, fue desgranando punto por punto todos las deudas y embargos que, por el momento, pesan sobre el club y que hacen muy difícil su viabilidad más inmediata. De hecho, el máximo mandatario no garantizó que muchos de los jugadores de la actual plantilla azulina regresen el próximo mes de enero tras las vacaciones navideñas si ven que es complicado que puedan cobrar.
En concreto el club tiene una deuda con la Seguridad Social que alcanza los 766.618 euros, 485.000 en vía ejecutiva y el resto en vía judicial. El presidente afirmó que se va a solicitar un aplazamiento de dicho deuda por un plazo de diez años al secretario de Estado y que ya se han comenzado a realizar las gestiones oportunas.
También hay 8.441 euros de Raúl Silveira y otros 4.442 de David Navarro reclamados ante AFE que le impiden al club reforzarse en el mercado de invierno. Además, a fecha de 18 de noviembre, los gastos generados por el club han ascendido a 246.065 euros, mientras que los ingresos han sido de 241.808 euros.
Intervinieron Iriondo y CanitoUno de los momentos más destacados de la noche se vivió cuando el socio José Antonio Mainé pidió un gesto de los jugadores ante el esfuerzo que van a realizar los socios tras las medidas que se van a adoptar. Fue entonces cuando tomó la palabra el técnico, Antonio Iriondo, que estuvo presente al ser socio y dijo que no podía estar de acuerdo con él, ya que “no les puedo pedir un esfuerzo a mis jugadores cuando han cobrado cuatro de los doce últimos meses”. Es más, Iriondo desveló que tres días antes de iniciarse la Liga los jugadores y técnicos se plantearon hacer una cooperativa y bajarse los sueldos al 50 por ciento para salvar la situación.
Por su parte, Canito, que también estaba, dijo que muchos de los jugadores tienen firmado en sus contratos ese famoso 15 por ciento de rebaja y que incluso algunos habían recibido ofertas superiores y habían apostado por quedarse en el San Fernando.
Apuntes El dinero municipal será para pagar a Carrera
Acosta dio a conocer que ayer mismo llegó al club el embargo de los 72.000 euros de la subvención municipal por parte de Moisés Carrera, que le reclama a la entidad azulina 61.440 euros de su contrato más 5.000 euros de las costas. Con ese dinero del Ayuntamiento, que iba a entrar en las arcas del club a primero de enero, se iba a pagar una nómina a la plantilla. Finalmente no se descarta pedir una moratoria para que se puedan levantar esos embargos y la entidad pueda coger un poco de aire.
La condonación de los carnés de los sociosOtra de las cuestiones que se abordo es la posibilidad de que los socios, de manera voluntaria, se pasen por la sede del club y dejen allí sus carnés hasta el final de temporada, pagando un precio especial para presenciar el resto de los partidos de Liga que se jueguen en Bahía Sur. Acosta afirmó que los precios que se han barajado son los de 15 euros en el caso de la tribuna y 10 en preferencia. Ahora resta por saber cuántos socios van a ser capaces de tener este gesto con la entidad azulina. El plazo establecido para llevar a cabo esta opción en un principio es hasta el 4 de enero, que es cuando el equipo juega el última partido de la primera vuelta.