Tanto López Silva, como Aarón Bueno, además de Fran Cortés y Velasco podrían actuar en esa posición, aunque cada uno aportaría cosas bien distintas al juego cadista. De esta forma, al tratarse de un partido en casa, lo más lógico parece apostar por un futbolista con mayor claridad de ideas de cara a aportar ese último pase que necesita el equipo para conectar con Pachón. Por ello Aarón Bueno parece el gran favorito a ocupar la plaza de segundo delantero, algo más retrasado que el goleador madrileño.
Otra posible opción sería adelantar al canterano José Miguel Caballero, pero el entrenador cadista no es muy amigo de cambiar lo que está funcionando bien, así que esa variante sería la más complicada, aunque no imposible según vaya transcurriendo el partido, que dará comienzo a las 12.00 del mediodía en el estadio Ramón de Carranza.
Por su parte, la UD Melilla no cuenta con ninguna baja, ni por lesión ni por sanción, por lo que Andrés García Tébar podrá poner a su once de gala sobre el césped gaditano. El equipo norteafricano ha preparado con tesón el encuentro para escapar de la mala racha en la que se encuentra inmerso. Los melillenses no han ganado en los cuatro últimos partidos, sumando únicamente un empate de doce puntos en liza. Sin embargo, en la capital gaditana nadie se fía de un buen equipo que, según el propio Jose González, no ha merecido perder esos últimos partidos.
Así, apunta el entrenador local que está totalmente convencido de que el Melilla ocupará una de las cuatro primeras posiciones cuando finalice la temporada, por lo que no dejar que se lleve puntos del Carranza se ha convertido en un objetivo doblemente importante.
buen último precedente
La última vez que la UD Melilla visitó Cádiz se fue con un 3-0 en contra gracias a los goles anotados de Carlos Caballero, Mariano Toedtli y Borja Rubiato, que sellaron la goleada en la campaña 2008-2009, que terminó con los amarillos subiendo a Segunda División A.
El madrileño Gálvez Rascón será hoy el árbitro que imparta justicia en el terreno de juego. Se trata de un colegiado que cumple su segundo año en la categoría y que nunca antes ha pisado el Carranza, pero que ya lleva dos partidos pitados esta temporada en el Grupo IV. Curiosamente, en ninguno de los dos partidos consiguió ganar el equipo local.
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