Asimismo, la organización destaca que el 62 por ciento de los juguetes tienen precios casi idénticos entre los distintos comercios encuestados, ya que la diferencia no supera el dos por ciento entre el precio más caro y el más barato. Además, un 16 por ciento tienen precios idénticos y sólo un seis por ciento de los juguetes muestra una diferencia de precio de más del diez por ciento entre establecimientos.
Con respecto a la encuesta realizada en 2009, de los 71 juguetes que aparecieron entonces y también se encuentran en el actual informe, 53 productos han subido su precio, 16 lo han bajado y dos lo mantienen igual.
No obstante, Facua recomienda comparar precios entre las grandes superficies y los medianos y pequeños comercios, así como comprobar que los juguetes sean acordes con la edad de los menores, que las advertencias estén en castellano y que se rechacen los juegos poco educativos o que fomenten la violencia o el sexismo.
En este sentido, la asociación insta a las administraciones central y autonómica a que incrementen los controles sobre las importaciones en las aduanas y las ventas en los establecimientos comerciales para evitar la intrusión de juguetes que no cumplan con la normativa de calidad europea.
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