Se trata de uno de los momentos más esperados, pero que no necesariamente implica el pistolezo de salida de la programación especial, dado que la localidad lleva todo el puente viviendo de lleno estas fechas tan señaladas en el calendario con distintas zambombas y la inauguración de parte de sus belenes, como ocurrió el pasado lunes con el municipal instalado en la Biblioteca Rafael de Pablos. Por segundo año consecutivo, la luz de la Navidad llegará una semana más tarde de lo habitual por razones económicas, como ocurre en otras localidades de la provincia, lo que no evitará que este año el alumbrado, que lleva bombillas de bajo consumo, llegue también a nuevas calles del centro.
Asimismo, aprovechando este día tan señalado, mayores y pequeños serán testigos de como la Plaza del Cabildo se convierte en una estampa blanca de la Navidad, dado que habrá nieve artificial, uno de los grandes atractivos para los niños, mientras que acto seguido también se procederá a la apertura del belén de la Iglesia de Regina Coeli.
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