La Unión Ciclista Internacional (UCI) comunicó al ciclista su positivo en un control efectuado el día 21 de julio en el Tour de Francia, que Contador atribuyó a una contaminación alimentaria tras el consumo de carne de ternera.
En un comunicado, la asociación ha considerado que el sector de vacuno es el único "realmente" interesado en llegar al fondo de este asunto y depurar responsabilidades, ya que, en su opinión, no existe constancia de que Contador haya interpuesto una denuncia formal por el supuesto delito contra la salud pública del que ha sido víctima.
Ha recordado que Asoprovac solicitó por escrito hace más de un mes al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, una investigación oficial que, "basada en el sistema de trazabilidad del vacuno del carne en Europa, permitiese depurar responsabilidades, incluidas las del propio ciclista".
Ha reiterado que el vacuno de carne europeo, y por tanto español, cuenta con un sistema de trazabilidad total que permite conocer todas las empresas y operadores implicados en la producción, sacrificio y comercialización de sus productos y, por tanto, exigirles responsabilidades si las hubiera.
Asimismo, ha subrayado que la utilización "fraudulenta" y la puesta en el mercado de sustancias prohibidas como el clembuterol son hechos constitutivos de delito contra la salud pública y castigados con penas de prisión de hasta cuatro años, multa e inhabilitación especial para ejercer la profesión de hasta diez años.
Por ello, ha instado al deportista a que denuncie por la vía legal los hechos que relata acerca de su positivo a clembuterol en los controles antidopaje del último Tour de Francia.
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