Las condiciones de hacinamiento e insalubridad en las que los solicitantes de asilo aguardan en el aeropuerto de Barajas debido al aumento exponencial de peticiones registradas en los últimos meses evidencian las dificultades para acceder al sistema de asilo español.
Estas son algunas de las preguntas que se plantean en torno al derecho de asilo y protección subsidiaria en España.
¿A quién concede España protección internacional?
A refugiados, es decir, personas extranjeras de nacionalidad no comunitaria o apátridas que huyen de sus países de origen porque son perseguidas por motivos de raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas, pertenencia a determinado grupo social, de género u orientación sexual. España reconoce el derecho de asilo a los refugiados.
A quienes no cumplen los requisitos para ser considerados refugiados pero que no puedan regresar a su país porque se arriesgan a ser condenados a pena de muerte o sufrir torturas y amenazas graves contra su vida. Se les otorga protección subsidiaria.
¿Qué nacionalidades piden más asilo en España?
Venezolanos (60.534), colombianos (53.564) y peruanos (14.308) acaparan casi el 80 % de las 163.220 solicitudes de protección internacional presentadas en 2023.
¿Qué derechos tiene el solicitante de asilo?
En primer lugar a ser documentado como solicitante de protección internacional y, por lo tanto, a permanecer en España, salvo que esté reclamado por otro país hasta que se resuelva su solicitud, que ha de comunicarse al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en España.
Tiene derecho a ser asistido por un abogado de forma gratuita si no puede pagarlo y por un intérprete, así como a conocer el contenido del expediente en cualquier momento.
¿Cuáles son sus obligaciones?
Colaborar con las autoridades españolas diciendo la verdad y detallando los motivos por los que pide asilo, presentar lo antes posible la documentación en que se apoye la solicitud, comparecer cuando sea requerido, informar sobre cualquier cambio de domicilio y facilitar la recogida de sus huellas dactilares.
¿Cómo y dónde se solicita?
Si llega a España y no puede entrar en territorio español, en el puesto fronterizo, mientras que si ya está en suelo español, debe solicitarse en las comisarías de Policía autorizadas y en los Centros de Internamientos de Extranjeros (CIE).
La solicitud se presenta personalmente y consiste en una entrevista, que debe efectuarse siempre de forma individual con un funcionario habilitado y en la que podrá contar con la presencia de intérprete y abogado.
En 2023, se presentaron 158.170 solicitudes dentro de España, 3.386 en puestos fronterizos y 877 en CIE.
¿Quién decide sobre las solicitudes?
Todas las solicitudes son valoradas por la Oficina de Asilo y Refugio (OAR) y las decisiones son tomadas por el ministro del Interior a propuesta de la Comisión Interministerial de Asilo y Refugio (CIAR).
¿Cómo es el procedimiento de protección internacional?
En la fase de admisión a trámite se descartan las solicitudes cuyo estudio no corresponde a España o que no reúnan los requisitos establecidos por la ley (que la persona esté reconocida como refugiada en un tercer país, proceda de un país seguro, haya reiterado una solicitud ya denegada en España sin circunstancias nuevas o sea europeo).
Si la solicitud se ha presentado en un puesto fronterizo o en un CIE, el peticionario deberá permanecer en el centro habilitado hasta que se decida si se admite a trámite o se rechaza. Las autoridades tienen 96 horas para notificar la decisión. Esto es lo que ocurre en el aeropuerto de Barajas, aunque no se están cumpliendo los plazos establecidos.
Si se admite, podrá entrar en España o salir del CIE, mientras que si se deniega puede pedir que se revise en el plazo de 48 horas desde su notificación. La administración dispone de otros dos días para notificar su resolución; si es negativa, el solicitante debe abandonar España, aunque antes podrá presentar recurso.
En caso de que la solicitud se haya presentado en territorio español, se valorará en el plazo de un mes si se admite y continúa el procedimiento de urgencia. Transcurrido ese tiempo, si no recibe una resolución de inadmisión, se considera admitida por silencio administrativo y el solicitante queda en situación de permanencia provisional en España.
Por contra, si no se admite, se ordenará el retorno, devolución, expulsión, salida obligatoria de España o traslado al país responsable de examinar la solicitud de asilo del peticionario.
¿Cuáles son los efectos de la concesión del asilo?
Los beneficiarios no serán devueltos al país de origen, obtendrán permiso de residencia y trabajo permanente, documento de identidad, tendrán derecho a la reagrupación de familiares directos y acceso a servicios públicos de empleo, educación, sanidad, vivienda o servicios sociales. Además, se reducirán los plazos de acceso a la nacionalidad española.
¿A qué nacionalidades concede y rechaza mayoritariamente España protección internacional?
El año pasado 7.330 personas lograron el estatuto de refugiado y 3.833 protección subsidiaria. Malienses (2.362), afganos (1.120), sirios (1.153), nicaragüenses (837) y hondureños (736) fueron las principales nacionalidades a las que se concedió asilo.
Por el contrario, 35.392 solicitudes fueron desfavorables con los colombianos a la cabeza (15.089), seguidos de marroquíes (3.787), peruanos (3.197), hondureños (2.578) y senegaleses (1.067).
Además, 41.487 personas recibieron protección por razones humanitarias, la mayoría de nacionalidad venezolana (40.674) después de que en 2019 el Gobierno comenzara a conceder este tipo de protección a raíz de la crisis política y humanitaria de Venezuela, que implica reconocerle un permiso de residencia o estancia temporal humanitaria para que no estén en un limbo jurídico.
Otra figura es la de la protección temporal que ha concedido España a casi 195.000 ciudadanos desplazados desde que estalló la guerra en Ucrania.