Si hay una noticia que ha marcado esta semana la actualidad en lo que a la Familia real se refiere, esa es sin duda la firma del divorcio de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín en secreto, de mutuo acuerdo y ante notario en Barcelona 2 años después de su separación.
Tal y como ha revelado ¡Hola!, los ex duques de Palma disolvieron formalmente su matrimonio en los últimos días de 2023 o principios de 2024, pero no ha sido hasta ahora cuando ha trascendido esta información que marca un antes y un después en la vida de la hermana del Rey Felipe VI.
Tras confirmarse el divorcio de doña Cristina, la Reina Sofía ha protagonizado su primer acto oficial y ha llamado la atención su rostro serio y pensativo, lejos de la sonrisas que suele lucir en todas sus apariciones. La Emérita ha presidido en el Acuartelamiento 'El Rey' de la Guardia Real la promesa o jura ante la Bandera de España y, aunque el acto era solemne, su actitud reflexiva y cabizbaja ha resultado muy significativa.
Al margen de su seriedad, que podría tener que ver con su hija -con la que tiene una maravillosa relación y a la que ha arropado especialmente desde su separación de Urdangarín- Doña Sofía ha destacado por su elegancia, luciendo un abrigo midi en color gris con bordados florales en color negro, cartera de mano y zapatos de tacón con puntera metalizada.