FACUA-Consumidores en Acción ha destapado un alarmante incremento de precios en alimentos básicos, llegando hasta un 875% entre el precio en origen y en supermercados. Este estudio abarca una amplia gama de productos, incluyendo frutas, verduras, legumbres, huevos y aceite de girasol.
El kilo de limones, un claro ejemplo, se paga a 0,20 euros en origen, pero su precio de venta promedio alcanza los 1,79 euros, un aumento del 695%. Es aún más significativo en cadenas como Aldi y Lidl, donde el precio llega a 1,99 euros por kilo, marcando un 875% de aumento.
Lentejas pardinas, un básico en la dieta, muestran un incremento del 369% en supermercados, y hasta un 596% en el caso de la marca La Asturiana en Hipercor. Las manzanas fuji no se quedan atrás, con un precio de origen de 0,73 euros y un aumento hasta 2,54 euros (248%) en puntos de venta.
El estudio también señala a productos como cebollas y garbanzos, donde los aumentos son del 326% y 207% respectivamente. En casos específicos como el de la marca Luengo de garbanzos en Carrefour, la diferencia llega al 412%.
En el ámbito de las hortalizas, el kilo de champiñones se encuentra en el mercado a 5,83 euros, frente a los 1,83 euros que cobra el productor, evidenciando un aumento del 218%. Alcampo e Hipercor registran los precios más altos, con un 335% más respecto al origen.
Las zanahorias y peras conferencia también sufren incrementos notables, del 265% y 198% respectivamente. El caso más extremo se presenta en la marca Rincón de Soto de pera conferencia en Eroski, con un 284% de aumento.
Incluso productos como la manzana golden y el aceite de girasol experimentan subidas considerables, siendo la manzana golden un 229% más cara en supermercados. El aceite de girasol, esencial en la cocina, registra un aumento del 108%.
Finalmente, el estudio destaca el caso de las fresas y las patatas, con incrementos de 191% y 214% respectivamente. El precio de las fresas, por ejemplo, sube de 3,94 euros en origen a 11,48 euros en puntos de venta.
FACUA insiste en la importancia del doble etiquetado, una medida que proporcionaría transparencia en este proceso y permitiría a los consumidores identificar los márgenes de beneficio excesivos de las cadenas de distribución.
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