No sé si Emilio Viqueira se ha metido en un bosque con sus declaraciones tras el encuentro del Benito Villamarín. Lo que sí sé es que tiene razón en todo cuanto dijo. Lo de los arbitrajes este año con el Xerez es de análisis. Decía, y ahí se salió bien de la marca periodística, que no ve mano negra en todo esto, pero es para pensarlo. Quizás que las relaciones del abogado del Xerez y la persona que tiene poderes importantes en el club con la Federación no sean las mejores puede tener mucho que ver. Escribo que tal vez por ahí puedan ir los tiros, aunque no afirmo absolutamente nada porque una afirmación conllevaría a poner en tela de juicio la honestidad y la profesionalidad de los colegiados. Que son humanos y se equivocan, pero es que ya son muchas equivocaciones continuadas y siempre en contra y nunca a favor. Y, por ello, desde el club hay que dar un golpe en la mesa para que, al menos, haya un comportamiento digno hacia el equipo, que haya un respeto que parece que ahora no hay por parte de los que se encargan de arbitrar los partidos. No me pareció mal lo que ha hecho Viqueira. También lo ha hecho Macua, el presidente del Athletic, y Preciado se acordó de todos los fallecidos de Mourinho y estaba en su derecho, porque es que en la que dicen que es la mejor Liga del Mundo, después de la de Escocia digo yo, el respeto hacia los inferiores hace tiempo que se ha perdido. O no es una falta de respeto decir que Barcelona y Madrid no pueden jugar un lunes. ¿Es que son menos profesionales los jugadores de Córdoba o Alcorcón, por ejemplo, que juegan esta noche o esos dos equipos no son de la LFP? Aquí, en esta liga a la escocesa, sólo mandan Madrid y Barcelona y los demás que hagan de comparsas y queden al recaudo de los que mal dirigen este fútbol nuestro. Por eso hay que gritar cuando las injusticias se suceden como están sucediendo en el Xerez.
También haría bien Viqueira -y si lo ha hecho, olé por él- sentarse a hablar con los técnicos para ver qué diantres pasa con tantas lesiones musculares que vienen lastrando el potencial del equipo. Hay lesionados, pero no son por lesiones de contacto, sino musculares, por roturas o microrroturas y habrá que analizar las razones de las mismas y de manera urgente, antes de que vayan a mayores.
Y también urge comenzar a puntuar de tres en tres para que el equipo no se vaya demasiado abajo. Las distancias con la zona de peligro se estrechan, muy poco a poco y sin miedos, y eso puede traer algunos nerviosismos que nunca son aconsejables. Por otra parte, las distancias con la zona de promoción de ascenso se mantienen y no sería bueno descolgarse porque eso acarrearía desilusión, aunque ya se sabe que el objetivo principal de la temporada es la permanencia una campaña más en una categoría en la que ya lleva el Xerez más campañas que en ninguna otra. Por eso, el domingo hay que ganar. Sin má
