La sesión de control al presidente andaluz, José Antonio Griñán, se convirtió ayer en un debate casi preelectoral, marcado por las continuas interrupciones -especialmente desde la bancada popular- y por choque frontal de las formas de entender y de ejercer la política. Griñán criticaba la involución del 28F de las propuestas ambiguas e inconcretas del PP, Arenas consideraba la política económica socialista un atentado al sentido común o un escándalo, y Valderas (de IU), solo conseguía la negativa por parte del presidente andaluz, que rechazaba que se hubieran incrementado las desigualdades en la región.
La estrategia del PSOE -así se ha visto a lo largo de esta última sesión plenaria- ha cambiado en algo tras la dimisión de Rafael Velasco: ahora va al ataque pero como consigna generalizada. Y así le contestó Griñán en el momento de coger la palabra después de oir a Arenas -utilizando el hilo argumental de Valderas- criticar su discurso triunfalista y considerar su política económica un “error y un atentado al sentido común, y su política de empleo, un auténtico escándalo”.
Con el discurso de las “profundas reformas” de las que habla Arenas, tan profundas “que ni se ven”, el presidente andaluz le acusó de realizar propuestas llenas de “ambigüedades y de inconcreciones”, presentando alternativas “sin concreción ninguna” y siempre pensando en las elecciones, por lo que no se sabe ni siquiera lo que propone.
Para José Antonio Griñán, las reformas “valientes, estructurales y profundas” del PP-A sólo significan una “involución del 28 de febrero”; un “adelgazamiento” del estado del bienestar; la privatización de servicios públicos esenciales, como la de educación, la sanidad y los servicios sociales; “menos igualdad”, y menos tolerancia, apuntando que ya Mariano Rajoy ha confirmado que derogará ley Igualdad y el matrimonio entre homosexuales.
“Más involución y contrarreforma porque son los mismos de hace 30 años, aunque hayan cambiado reiteradamente”, le decía Griñán a Arenas, apuntádole que las oportunidades donde se ganan es en las urnas y no en las encuestas, y que los electores quieren “menos ambigüedad y más compromiso”.
Sin embargo, para Arenas, el único que no se ha enterado de su alternativa presupuestaria es Griñán. Es como “un OVNI al margen de realidad” mientras habla de que se han reducido las desigualdades. “Deje de vender humo”, le pedía Arenas para ironizar con que está muy bien “que navegue por China o Estados Unidos”, se centre en esta tierra, donde su política económica es un “error y un atentado al sentido común, y su política de empleo, un auténtico escándalo”.
Especialmente crítico era Arenas con la política del empleo, con un plan Memta “que no existe ni se le espera”, un Proteja “que ha desaparecido” y un invento, el Proyecta, “que nace sin un euro adicional”. “Su estrategia no es acabar con el paro, sino esconder el paro de las listas oficiales”, le reprochaba.
Lo de China y lo de las desigualdades venía a cuento de la respuesta de Griñán a Diego Valderas, de IU, al que le trató de explicar que parte de la culpa de la inestabilidad financiera actual la tenía el gigante chino por tener una moneda infravalorada, país al que acusó de hacer dumping monetario y social.
Al margen de la salida chinesca, Griñán sí que le reconoció a Valderas el “enorme” problema que supone el paro para una buena parte de la sociedad, aunque negó que se hubieran incrementado las desigualdades en estos años acogiéndose a la Encuesta de Presupuestos Familiares, la “realidad de los datos oficiales”, decía. Además, defendía el esfuerzo realizado por el Gobierno andaluz por mantener las prestaciones y los servicios públicos.
Sin embargo, no convenció a Valderas, que le acusó -antes de que lo hiciera Arenas- de tener una agenda social “cargada de humo, que es lo que está vendiendo”, especialmente en lo que se refiere a la convergencia social, pidiéndole que rectifique “esa soberbia política y de gobierno que le ciega”.
PSOE y PP se enfrentan pese a defender el modelo del Estado de las autonomías
El Parlamento andaluz aprobó ayer una iniciativa del PSOE que manifiesta su apoyo al mantenimiento del actual modelo autonómico ante la “ofensiva centralista de la derecha”, una iniciativa que el PP tildó de “cuento chino”, mientras IU la consideró “electoralista”.
Pese a las diferencias y el enfrentamiento dialéctico, PSOE y PP respaldaron el actual modelo autonómico, primer punto de la iniciativa, e IU se abstuvo.
Después de referirse a las recientes declaraciones del presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, sobre la “revisión” del Estado de las autonomías y a “su agenda oculta”, la diputada del PSOE-A, Susana Díaz no dudó en señalar que hay una “ofensiva” contra las autonomías de los que “pretenden privatizar” los servicios públicos sociales. “Algunos han puesto en marcha la trituradora de la España de las autonomías”, alertó Díaz, que enfatizó su defensa del autogobierno, que ha propiciado “más bienestar y más Andalucía”.
En este marco, situó la política económica de los socialistas y, en especial, el presupuesto andaluz de 2011, y recalcó el apoyo de su partido al Estatuto y al 28-F, respaldo que “algunos fingen”.
Antonio Sanz, del PP, vinculó la propuesta al “nerviosismo” del PSOE por la pérdida de apoyos electorales y al “interés de ocultar la incompetencia” del Gobierno andaluz en la gestión de las competencias.
“La iniciativa es un cuento chino, una cortina de humo y carece de sentido porque nadie del PP ha cuestionado el Estado autonómico. Es el PSOE el que ha acabado con la igualdad entre comunidades al apoyar el Estatuto de Cataluña”, criticó. Consideró que “aquí el problema es que hay mucho Estatuto para tan poco Gobierno”.
José Antonio Castro, de IU, atribuyó la iniciativa a intereses electorales de los socialistas, aunque alertó contra la “agenda oculta” del PP y “sus” pretensiones privatizadoras de los servicios públicos.
Los socialistas rechazan la fiscalización de las ayudas
La mayoría del PSOE-A rechazó ayer en el Parlamento una iniciativa del PP-A, que fue respaldada por IU, en la que solicitaba a la Cámara de Cuentas fiscalizar en su gestión y resultados los programas de formación para el empleo de los años 2006 a 2010.
Los socialistas argumentaron su negativa en el hecho de que el Consejo de Gobierno haya pedido a principios de noviembre que la Cámara de Cuentas audite estas ayudas entre el 2005 a 2010, petición que formalizó el PP en el Parlamento el 29 de octubre.
Las peticiones surgen tras conocerse que la empresa Aulacen Cinco SL, propiedad de la mujer de Rafael Velasco, recibió 730.000 euros de estas ayudas, lo que provocó la dimisión de diputado y número dos del PSOE-A.
Sin embargo, la portavoz popular, Esperanza Oña, aportó otros casos pasados como las subvenciones recibidas por la empresa del alcalde socialista de Punta Umbría (Huelva) o las de el esposo de la alcaldesa de Martos (Jaén), también del PSOE. Sostuvo que tras la concesión de estas ayudas hay “discrecionalidad, escándalo y sectarismo”, por lo que cree que el PSOE está “bajo sospecha”, mientras el Gobierno andaluz está “instalado en el silencio, en correr un tupido velo como estrategia”.
Ángel Gallego, del PSOE, cuestionó la “verdadera” intención del PP e ironizó con la actitud de Oña: “Si fuera secretaria de Moisés habría menos mandamientos”.
Por la mañana, el PP había pedido la dimisión del titular de Empleo, Manuel Recio, por “mentir” sobre las ayudas a Aulacen Cinco, un extremo que negó Recio, que acusó al PP de ser “como la Inquisición” y de “perseguir a los progresistas”.