Son muchos los sectores que están sufriendo en sus carnes la crisis económica, y uno de los más afectados son los hosteleros, que a estas alturas no pueden hacer frente a la situación sin tomar medidas drásticas. Soluciones drásticas para problemas graves. La patronal provincial ha solicitado a los 44 ayuntamientos que hagan uso de su competencia para permitir a los bares de copas abrir dos horas más durante las fiestas navideñas. No es una petición novedosa, pero no por eso deja de ser grave que los empresarios del sector tengan que mendigar unas pocas horas más para poder hacer unas cajas decentes. La crisis golpea especialmente al ocio. Ya se ha contrastado la pésima campaña veraniega en el sector servicios, que se ha prolongado sobre un invierno con muy pocas perspectivas. Pero resulta llamativo que los hosteleros soliciten ayuda a los ayuntamientos, cuando la competencia sobre los horarios de apertura de los locales de ocio es de la Junta de Andalucía, y si ésta quiere tomar medidas puede empezar a plantear cambios en las normas y no siempre buscar recursos económicos. Ahora hay que recordar que fue la administración andaluza la que condenó a muerte a un sector con la excusa de acabar con el botellón. Entonces se limitó el horario, pero nada se consiguió para reducir el ruido y las molestias que generaban los jóvenes. Ahora la crisis llama a la puerta y pide más horas.