Asaltos violentos cometidos en 2017 en casas de empresarios de la zona de Bescanó cuando se encontraban en ellas sus moradores
El Tribunal Supremo ha confirmado las penas de hasta 41 años de prisión impuestas a seis acusados de asaltos violentos cometidos en 2017 en casas de empresarios de la zona de Bescanó cuando se encontraban en ellas sus moradores, a los que amenazaban armados y ataban para robarles dinero y joyas.
En una sentencia el alto tribunal desestima los recursos de los condenados contra la resolución dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que a su vez confirmó la de Audiencia Provincial de Girona.
La Audiencia declaró probado que antes del verano de 2017 José Antonio M.M., que trabajaba para la empresa "El Cobrador del Frac", mantuvo conversaciones con el matrimonio formado por Lluis B.P. y Elisabeth S.F. para que pagasen una deuda.
Durante las mismas Lluis y Elisabeth facilitaron a José Antonio información de viviendas de la zona de Bescanó, en la que vivía el matrimonio, en las que podía conseguir dinero mediante asaltos al ser fincas aisladas cuyos moradores tendrían dinero y bienes valiosos por su actividad empresarial.
El matrimonio envió el 30 de junio de 2017 un WhatsApp con nueve lugares a José Antonio, que se puso en contacto con otras personas para llevarlos a cabo, entre ellos los también condenados José Ángel H.G., Keiser M.E. y Wilson C..
José Antonio M.M., José Ángel H.G., Keiser M.E. y Wilson C., junto a otras personas no identificadas, pactaron la realización de robos sobre la base de la lista remitida en madrugadas de días separados desplazándose en dos vehículos desde la zona de L'Hospitalet de Llobregat, donde vivían.
El 8 de julio de 2017 José Ángel H.G., Keiser M.E. y Wilson C., junto con otras personas no identificadas, se desplazaron hasta un restaurante de Bescanó, treparon hasta una terraza y rompieron una ventana para entrar en la zona de vivienda, donde se encontraba una pareja en el dormitorio.
Les obligaron a permanecer boca a bajo y les intimidaron con lo que parecía una pistola mientras robaban varios collares, pendientes y pulseras y unos 15.000 euros, y antes de irse les ataron a la cama.
El 29 de julio de 2017 fueron a una masía de Bescanó, donde rompieron el cristal de la puerta de entrada, causando un ruido que alertó al dueño de la casa y a su hija, que intentaron impedir el acceso de los asaltantes.
Pero tras intimidarles con la pistola y un cuchillo les obligaron a tumbarse en una cama mientras se hacían con unos mil euros.
El 28 de agosto siguiente accedieron apalancando una ventana a una vivienda de la calle de Josep Plà de Bescanó, donde se encontraban durmiendo un matrimonio y su hijo, a quienes amedrentaron con varios cuchillos y con la pistola y donde robaron 30.000 euros tras obligarles a abrir una caja fuerte, además de joyas.
En la madrugada del 7 de octubre de ese mismo año José Ángel H.G., José Antonio M.M. y otras personas fueron en dos turismos, uno de ellos el de "El Cobrador del Frac" que utilizaba habitualmente el segundo, hasta una masía de Vilanna.
Entraron en la finca apalancando una puerta y se dirigieron al dormitorio del morador, al que amedrentaron con la pistola y varios destornilladores de gran tamaño y le hirieron con unas tijeras en un dedo ya que no le creyeron cuando les dijo que no tenía caja fuerte, y además le ataron y le encerraron en un cuarto de baño.
El Supremo confirma la pena de 41 años de prisión para José Ángel H.G., 21 para José Antonio M.M., 18 para Keiser M.E. y Wilson C. y tres años y diez meses para Lluis B.P. y Elisabeth S.F..