El Departamento Meteorológico de Kenia vaticinó, sin embargo, que las intensas lluvias continuarán hasta enero de 2024
El número de muertos en Kenia por las lluvias torrenciales y las inundaciones causadas por el fenómeno meteorológico del El Niño ascendió de 120 a 136, mientras más de 460.000 personas se han visto desplazadas, informaron las autoridades.
"Desafortunadamente, en las últimas 24 horas, se han registrado 16 muertes, elevando el número de víctimas a 136", dijo el viceministro keniano del Interior, Raymond Omollo, según recogieron a última hora de ayer medios locales.
"La distribución de comida continúa en los condados afectados, incluyendo lanzamientos desde el aire en zonas inaccesibles", añadió.
Los territorios kenianos más afectados son los condados de Mandera (noreste), Wajir, Garissa y Río Tana (este), si bien otra decena se encuentran en situación de alerta máxima.
Según Omollo, se espera "una reducción de las lluvias en la mayoría de partes del país, y condiciones soleadas y secas prevalecerán en la mitad norte" de su territorio.
"Sin embargo, se espera que continúen lluvias ocasionales en las partes sureñas", puntualizó.
Después de que las autoridades anunciaran esta semana la movilización de 7.000 millones de chelines (unos 42 millones de euros) para ayudar a los afectados, Omollo informó sobre la creación de un centro de respuesta nacional que coordinará desde Nairobi todas las medidas puestas en marcha por las diferentes agencias del Gobierno y organizaciones humanitarias frente a la crisis desatada.
El Niño ha provocado inundaciones repentinas, anegamientos en llanuras bajas, desbordamientos de ríos, deslizamientos de tierra, pérdida de ganado y destrucción de cultivos e infraestructura en diferentes puntos del país, sobre todo a lo largo de la franja costera, en zonas de las tierras altas centrales, las tierras bajas del sureste y varias áreas del noreste y noroeste del país.
El mes pasado, el presidente keniano, William Ruto, fue criticado por asegurar que el país no experimentaría lluvias derivadas de este fenómeno, sólo fuertes precipitaciones que "no serían destructivas".
El Departamento Meteorológico de Kenia vaticinó, sin embargo, que las intensas lluvias continuarán hasta enero de 2024.
El Niño es un cambio en las dinámicas atmosféricas ocasionado por el aumento en la temperatura del océano Pacífico.
Estas inundaciones llegaron después de la peor sequía registrada en el Cuerno de África en las últimas cuatro décadas, una falta de agua que dejó a Somalia al borde de la hambruna y con 6,6 millones de personas bajo inseguridad alimentaria aguda, según la ONU.