La
inteligencia artificial (IA) ha aterrizado en un mundo muy sensible,
el de las inversiones, donde una mala decisión puede poner en peligro el patrimonio de los inversores, pero a su vez, la
tentación de anticiparse a lo que pueda hacer el mercado es muy grande y los inversores profesionales ven una gran oportunidad en las herramientas que ofrece la IA.
Un estudio de
Invesco basado en las opiniones de 130 inversores profesionales revela que este colectivo espera que el uso de la IA crezca significativamente en los próximos años. Mientras que una minoría (29%) ya la utiliza para desarrollar y probar estrategias de inversión,
la gran mayoría (76%) espera
hacerlo en el futuro. Y aunque el 20% la utiliza actualmente para monitorear y ajustar posiciones de inversión en tiempo real, más de la mitad (55%) espera hacerlo en el futuro.
"Entre los inversores mayoristas, encontramos una preocupación acerca de que las estrategias de cartera impulsadas por la IA puedan eclipsar los modelos tradicionales", explica
Bernhard Langer, director de inversiones de Estrategias Cuantitativas de Invesco. "Hay una sensación de que los modelos impulsados por la IA serán atractivos para los inversores en el futuro, especialmente los más jóvenes, lo que significa que las empresas deben adaptarse rápidamente", añade.
No obstante, los encuestados también
mostraron inquietudes respecto al uso de la IA en las inversiones. Sus principales preocupaciones son la
complejidad (78%) y la
calidad y completitud de los datos (51%).