Al concejal de Cultura, Antonio Castillo, no le sentó nada bien esta propuesta, que vino acompañada de una serie de alusiones a un supuesto enfrentamiento entre el Ayuntamiento de Cádiz y la empresa que gestiona la explotación del yacimiento, Monumentos Alavista. Castillo aseguró que “no existen desavenencias. O se cumple la legalidad o no se cumple”.
El edil popular esgrimió que “lo que no se puede permitir es que la empresa haga lo que quiera”, además de decir que un informe de la Junta de Andalucía ha destapado que la empresa concesionaria “ha encontrado nuevos restos pero que estos no se han entregado a la administración competente”, que en este caso es la Delegación Provincial de Cultura.
También se hizo hincapié en que “no es lo mismo una concesión de gestión que una privatización del bien”.
Empresa
Y justamente había pedido la palabra en el Pleno el responsable de la empresa gestora del yacimiento, Germán Garbarino, quien se quejó de que a los concejales populares “no se les ha visto el pelo por allí”. Garbarino mostró varios documentos en los que, según él, se acredita que hay daños en el yacimiento a causa de la obra de Entrecatedrales, además de asegurar que no se está realizando ninguna excavación en la Casa del Obispo.
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