Cisjordania ocupada vivió hoy otra noche de redadas y enfrentamientos con fuerzas israelíes que se saldó con más de 50 arrestos y dos palestinos muertos, así como un intento de ataque, mientras los fallecidos en este territorio ya son 163 desde que empezó la guerra entre Israel y Hamás en Gaza hace un mes.
Según informó la agencia palestina de noticias Wafa, dos jóvenes palestinos murieron en choques con tropas de Israel en incidentes separados, uno de ellos de 19 años, que pereció por disparos israelíes en la aldea de Beit Anan, en el centro-norte cisjordano.
El otro muerto, de 24 años, falleció en la localidad de Sair, en el área sur de Cisjordania, donde hubo choques con tropas israelíes que se saldaron a su vez con al menos dos heridos y decenas de personas que fueron atendidas por servicios médicos en la zona por inhalación de gases lacrimógenos.
Las incursiones israelíes se produjeron a su vez en distintos puntos de toda Cisjordania, lo que dejó al menos 56 arrestados, en el marco de una extensa campaña de detenciones por parte de Israel, que ha detenido ya a más de 1.200 personas, muchas de ellas con sospechas de estar vinculadas al movimiento islamista Hamás.
El Ejército israelí concretó en un comunicado que detuvo a 28 personas estas últimas horas, "incluidos 28 terroristas" de Hamás.
Según informó la Policía, una persona envuelta con la bandera de Hamás se acercó esta mañana con un cuchillo a los guardas de seguridad del paso militar de Qalandia, en Jerusalén Este ocupado, que respondieron disparando e hiriendo a la presunta atacante.
Hasta ahora, arrestos de las fuerzas israelíes han abarrotado las prisiones en Israel, donde habría en torno a 7.000 presos en la actualidad, más de 2.000 de ellos bajo arresto administrativo, sin acusaciones formales ni fecha de juicio o liberación.
Según la ONG israelí Hamoked, la cifra de palestinos en detención administrativa no tiene precedentes, y ni en los años de la Primera o Segunda Intifada hubo tantos arrestados bajo esta condición.
Israel se hizo con el control de Cisjordania ocupada en 1967, y desde entonces mantiene una larga ocupación militar y colonización sobre este territorio, que vive también este 2023 su mayor escalada de violencia desde hace dos décadas.
En lo que va de año han muerto ya 371 palestinos en territorio cisjordano e Israel por disparos de tropas o colonos israelíes, entre ellos atacantes o milicianos en enfrentamientos armados, pero también civiles y al menos 84 menores.
Del lado israelí han muerto 36 personas por el prolongado aumento de ataques de palestinos, la mayoría colonos en territorio ocupado, y seis miembros de las fuerzas de seguridad.
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