La federación local de asociaciones de vecinos advierte de la necesidad de controlar en mayor medida a estos animales, que en muchos casos se encuentran prácticamente abandonados y que además conviven con los vecinos. “La Delegación de Medio Ambiente debería tener más precaución sobre los asentamientos que tenemos en la ciudad, que no son pocos, y proteger a la población, sobre todo teniendo en cuenta que se ha declarado el virus de la Fiebre del Nilo y que la presencia de caballos está prohibida a menos de 500 metros de los núcleos de población”, explicó el presidente de Solidaridad, Sebastián Peña.
En este sentido, la federación recuerda la existencia de una orden de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía -de 21 de marzo de 2006-, a través de la cual se regula la convivencia entre personas y animales, advirtiéndose de la prohibición antes referida.
Por esta circunstancia, Solidaridad confía en que estos animales sean trasladados inmediatamente de lugar, ya que “las personas no pueden convivir con los animales, y menos en un estado tan lamentable como el que estos presentan”.
Los caballos a los que hace referencia la denuncia de Solidaridad se encuentran junto al aparcamiento de la barriada de La Constitución, que se encuentra totalmente abandonada y repleta de todo tipo de desperdicios.
Casi tres semanas de virus
El virus de la Fiebre del Nilo Occidental fue declarado oficialmente por la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía el pasado 3 de septiembre. Hasta el momento se tiene constancia de que ha fallecido un caballo en el término municipal de Jerez afectado de este virus, encontrándose otros tres enfermos.
Sin embargo, los propietarios de algunos de estos animales enfermos han advertido de que el número de caballos afectados por el virus puede ser sensiblemente mayor, especulando incluso con la posibilidad de que algunos de ellos hubieran ya fallecido víctimas de esta enfermedad, aunque este extremo no ha sido de momento confirmado por la Consejería de Agricultura y Pesca.
La Encefalitis del Oeste del Nilo es producida por el virus West Nile y se trata de una enfermedad infecciosa no contagiosa que afecta principalmente a aves y que se transmite por la picadura de un mosquito. Son las aves migratorias las que actúan como principal reservorio epidemiológico. En ningún caso los caballos pueden contagiarse el virus entre sí ni infectar a los humanos.
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