La trágica noticia ha sido confirmada. La familia de
Shani Louk, joven de 22 años con raíces germano-israelíes, ha confirmado su fallecimiento tras las devastadoras imágenes donde "se podía ver que era trasladada en estado inconsciente en un vehículo". El ataque, ejecutado el 7 de octubre por el
Hamás contra Israel, tuvo un saldo aproximado de 1.400 muertos.
"Desafortunadamente, recibimos ayer la noticia de que mi hija ya no está con vida", declaró con pesar
Ricarda Louk, madre de Shani, a la emisora alemana RTL. Hasta el momento, tanto las autoridades alemanas como israelíes no han emitido comentarios al respecto, aunque se señaló que "la información le fue comunicada por el Ejército israelí".
Ricarda también compartió una información adicional y desoladora: el cuerpo de Shani no ha sido hallado todavía. Sin embargo, "fue hallada una astilla de un hueso del cráneo y se había tomado de ella una muestra de ADN", según datos proporcionados por la agencia alemana DPA.
Aunque había esperanzas de encontrarla con vida, la madre cree que su hija
probablemente murió el mismo 7 de octubre, víctima de "un posible disparo en la cabeza durante el ataque".