El acusado aprovechó para acariciarle la zona vaginal con los dedos, "quedándose la niña paralizada por lo inesperado de la acción"
La Fiscalía pide casi 9 años de prisión para un fisioterapeuta acusado de abusar sexualmente en diciembre de 2018 de una futbolista menor de edad de un club deportivo del barrio de Sants de Barcelona, a la que le realizó supuestos tocamientos en la zona genital mientras la masajeaba.
En un juicio que ha comenzado hoy miércoles en la sección novena de la Audiencia de Barcelona, el ministerio público solicita para el acusado un total de 8 años y 11 once meses de cárcel por dos delitos de abuso sexual, uno de ellos con introducción de miembros corporales, así como al pago de una indemnización de 8.000 euros.
Según el escrito de acusación del ministerio público, los hechos sucedieron el 20 de diciembre de 2018, cuando la víctima -que en aquel momento era menor de edad- se sometió a un masaje muscular realizado por el procesado.
El ministerio público sostiene que el acusado aprovechó para acariciarle la zona vaginal con los dedos, "quedándose la niña paralizada por lo inesperado de la acción".
Fue entonces cuando el fisio -prosigue el escrito- le introdujo dos dedos en la vagina, "moviéndolos en su interior durante un lapso de tiempo indeterminado".
La joven decidió entonces ir acompañada a las sesiones posteriores para evitar quedarse a solas con el fisioterapeuta, hasta que la tarde del 20 de mayo de 2019 se vio sin nadie a su lado en la sala de masajes, sostiene la Fiscalía.
Según detalla el ministerio público, el procesado le dijo esa tarde que se agachara hasta tocarse los pies con las manos, momento que aprovechó el acusado para "aproximar su zona genital a los glúteos de ella, estando separados sólo por la ropa".
La joven se apartó "cuando notó el pene" del acusado en su parte trasera, y en ese momento -relata el escrito de acusación- el fisioterapeuta le indicó que se tumbara y acto seguido le dijo: "Me estás poniendo malo".
Una vez tumbada, la víctima, por miedo a un episodio similar al que había vivido con anterioridad, "mantuvo en todo momento las piernas cerradas mientras le masajeaba el muslo derecho", concluye la Fiscalía.
El ministerio público también indica en su escrito que la víctima sufre un trastorno adaptativo reactivo leve que le causa dificultad para hablar del tema, susceptible de tratamiento psicológico.
Por su parte, el acusado, que ha contestado a todas las partes, ha negado los hechos y ha explicado las técnicas de masaje que utilizaba y de qué manera abordaba las lesiones, y ha afirmado que siempre trabajaba con la puerta abierta.
El juicio, que inicialmente estaba señalado únicamente para hoy, está previsto que continúe el próximo 3 de noviembre.