Álvaro Morata, autor ante Georgia del primer triplete de su carrera con la absoluta española, con la que ya alcanza 33 tantos en 65 encuentros, recibió el balón del partido firmado por todos sus compañeros y aseguró que lo guardará en una urna en un museo "en la habitación de los niños".
Hasta el encuentro de Tiflis en el que España goleó a Georgia con triplete de Morata (1-7), el delantero madrileño solamente había marcado un triplete en una ocasión a nivel de clubes. Lo logró en septiembre de 2017 en las filas del Chelsea en un partido en casa del Stoke City.
En las categorías inferiores de la selección española, integrando la sub-21, llegó a marcar hasta cuatro tantos hace diez años en su partido más goleador, a Austria en septiembre de 2013.
"En la sub-21 metí alguno, pero obviamente que es especial meter un triplete con la absoluta y sobre todo en un partido que nos ayuda mucho en la fase de clasificación. Estoy muy contento y orgulloso", dijo a los medios de la Federación.
"Este balón lo meteré en una vitrina y en la habitación de los niños, que siempre me piden estas cosas para el museo, aunque no lo saquen de la urna estoy contento. Tengo que agradecer muchísimo a mis compañeros porque han sido generosos", añadió.
Morata está protagonizando un gran inicio de temporada, autor de tres tantos en tres partidos con el Atlético de Madrid, uno al Granada en la primera jornada de LaLiga y un doblete en Vallecas al Rayo en la tercera, antes de brillar con su triplete con la selección española.
El martes, en Granada ante Chipre, buscará extender su buena dinámica tras alcanzar una media de 0,52 tantos por encuentro disputado con la selección española y acercándose al podio de goleadores si supera los 35 de David Silva y los 38 de Fernando Torres. Ha marcado siete tantos en sus nueve últimas apariciones con la Roja.
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