El auto de la audiencia preliminar del caso de Mari Luz Cortés, la niña de cinco años muerta en 2008 supuestamente a manos de Santiago del Valle, dictado por la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Huelva, María José Fernández Maqueda, establece como hecho probado que el principal imputado, Santiago del Valle, “vio a la menor y le tiró un muñeco para llamar su atención”.
Los hechos descritos en el auto de la juez, al que ha tenido acceso Europa Press, coinciden en su mayoría con el escrito del Ministerio Fiscal y únicamente se excluyen las fotografías obrantes del auto relativas al levantamiento del cadáver.
El auto, al que tuvo acceso Europa Press, narra como Santiago del Valle junto a su esposa, Isabel García, -la cual se encuentra ya fuera del caso-, se mudó en 2007 a Huelva desde Sevilla para vivir en el barrio onubense del Torrejón. Así, fija que Santiago del Valle “pasaba muchas horas en la ventana del domicilio observando a las niñas que pasaban por allí” pese a “las recriminaciones de su esposa y a los problemas que le había causado en el pasado”. Igualmente, recuerda que Santiago del Valle cuenta con antecedentes por abusos a su propia hija.
Además, el principal imputado en este caso, acusado de un delito contra la libertad sexual y de asesinato, también salía en el coche de su hermana Rosa, imputada por asesinato, “con la intención de localizar niñas para satisfacer sus deseos e impulsos sexuales”.
El 13 de enero de 2008, sobre las 16,35 horas, Mari Luz fue a un kiosco cercano sola a comprar chucherías. A la vuelta, Del Valle, asomado a la ventana, “que la vio pasar y reconoció como una alumna del colegio Diocesano y con la intención de abusar sexualmente de la menor, comprobando que no había nadie por la calle, dado la hora y el tiempo desapacible, y que Isabel y su hermana Rosa se encontraban dormitando tras el almuerzo, llamó su atención tirándole un muñeco, que habría preparado para tal finalidad”.
Ante esto, Mari Luz, “confiada al ser su barrio y estar al lado de su casa”, se adentró en el portal para devolverle el muñeco a Santiago que le ofreció otra chuchería o un muñeco. “La menor subía el único corto tramo de escaleras que conducen hasta la primera planta”, mientras que Santiago del Valle “se situó a su espalda y para obtener placer sexual le tocó las nalgas” y ante la resistencia de la menor “él la agarró por el tórax desde atrás y ante el temor de que gritase le tapó la boca y la golpeó con fuerza en la cabeza contra una de las barras de hierro que sostienen la escalera”, lo que le ocasionó varias contusiones.