A pesar de que su monoplaza apenas ha evolucionado en las carreras disputadas con respecto a los de sus rivales, Alonso ha conseguido no quedar descolgado en la lucha por el Mundial, aunque de seguir con un coche con unas prestaciones inferiores a los Red Bull y los McLaren quedará en peligro el objetivo del asturiano.
Así, tras ocho carreras celebradas, Alonso es cuarto en el Mundial con 94 puntos, nueve menos que actual líder, el británico Lewis Hamilton (McLaren), que tiene 109 y al que siguen en la clasificación su compatriota Jenson Button (McLaren) y el australiano Mark Webber (Red Bull), con 106 y 103 puntos, respectivamente.
Pese a todo, la tercera edición de la carrera con sede en el trazado urbano de Valencia será la primera a la que Alonso llegue a priori con opciones de luchar por el podio, después de que en las dos anteriores, que disputó como piloto de Renault, no estuviera entre los coches más potentes.
Además, para intentar acortar distancias con respecto a Red Bull y McLaren y pugnar por la victoria en Valencia, Ferrari tratará de dar un salto de calidad en los coches de Fernando Alonso y el brasileño Felipe Massa con un destacado paquete de novedades que tiene previsto montar la escudería italiana en el GP de Europa.
En el circuito urbano de Valencia Ferrari introducirá varias modificaciones y actualizaciones en el F10. La más destacada: una nueva configuración para el sistema de escape que tiene como objetivo mejorar la eficacia aerodinámica del coche.
Además, también habrá más actualizaciones aerodinámicas en la parte trasera del coche, dentro de un programa de evolución del monoplaza que empezará en Valencia pero que, según ha avanzado Ferrari, tendrá continuidad en las tres siguientes carreras.
Uno de los candidatos al triunfo en Valencia, el británico Lewis Hamilton, tratará de consolidar su liderato en el campeonato, después de acceder a él en la última carrera disputada.
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